El fiscal pide 1.000 años para dos etarras por el atentado de Vallecas

Los que fueran máximos responsables de ETA Juan Antonio Olarra Guridi y su compañera Ainhoa Mujika Goñi fueron juzgados ayer en la Audiencia Nacional por su participación en un atentado con coche bomba en el barrio de Vallecas (Madrid), en 1995, y en el que murieron 6 personas y otras 44 resultaron heridas. El fiscal solicitó para ellos penas que suman 986 años de cárcel, aunque en caso de ser condenados, sólo cumplirían 30. Los etarras se negaron a declarar, alegando que no reconocen legitimidad al tribunal.

Los dos etarras, que hace 12 años, cuando ocurrieron los hechos, no pertenecían todavía a la cúpula de la organización terrorista, sino al comando Madrid, están acusados de haber realizado una serie de vigilancias a una de las furgonetas que habitualmente transporta a personal civil de la Armada.

Esos datos fueron utilizados posteriormente para colocar un coche bomba, cargado con 50 kilos de amosal, que los terroristas hicieron estallar a su paso,

Los datos de los seguimientos habían sido anotados a mano por los procesados en una libreta que fue encontrada en un piso de la calle de Doctor Fleming, de Madrid, que habían utilizado los miembros del comando.

Olarra, en primer lugar, y luego Mujika, afirmaron que no iban a declarar nada en el juicio, porque consideran que el tribunal no tiene legitimidad para juzgarles.

El resto del juicio los etarras lo pasaron hablando y riéndose entre ellos, incluso durante la declaración de Santiago Esteban Rodríguez, hijo de un oficial administrativo de la Armada que resultó muerto en el atentado.

Encarado con los etarras

Esteban relató la situación familiar tras la muerte de su padre. "Mi familia sufrió una fuerte desestructuración. Mis hermanas necesitan asistencia psicológica, mi hermano tuvo que ser ingresado en un hospital psiquiátrico y a día de hoy continúa ingresado; mi madre cayó enferma y mi madrastra se fue de casa. Nos quedamos solos.

Visiblemente emocionado, el testigo afirmó: "A pesar de que asesinen, chantajeen e intenten desestabilizar la democracia, no lo van a conseguir. Tenemos una sociedad fuerte y justa que repudia el terrorismo". Y encarándose con los dos acusados, les dijo: "Y vosotros lo único que tenéis es la cárcel". El presidente del tribunal le instó a que no se dirigiera directamente a los procesados.

El juicio se reanuda hoy. Es el primero que se celebra en España contra Ainhoa Mujika, mientras que Olarra ya ha sido juzgado y condenado en otras cinco ocasiones a penas que superan ampliamente los 30 años de prisión, el máximo periodo de cárcel que le es aplicable.

Por otro lado, el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu ordenó a la policía que impidiera la celebración del Gudari Eguna (Día del Soldado Vasco) que se iba a celebrar en Estella (Navarra) por haber sido organizado por las organizaciones ilegales Ekin y Segi.

En el marco de esa celebración se produjeron varios actos de violencia callejera en Euskadi, informa Aitor Guenaga. Un sabotaje contra una catenaria situada en Rentería dejó ayer durante más de cinco horas a más de 4.000 personas sin poder utilizar la línea de tren de cercanías que une esa localidad con San Sebastián. Los violentos cortaron las contrapesas de la catenaria de la línea de Renfe entre Rentería e Irún, lo que obligó a impedir el tráfico ferroviario entre las 6.50 y las once de la mañana. El sabotaje afectó también a los trenes de larga distancia que llegan a Irún como el expreso de Barcelona y el de Lisboa o los que unen Irún con Madrid (Intercity) o con A Coruña. Para estos servicios, Renfe habilitó servicios de autobuses, pero ese esfuerzo no evitó que muchos afectados llegaran tarde.