Pinto, y centro

Un monolito en la esquina en la que confluyen la calle del Hospital y la de la Maestra María del Rosario, en el centro de Pinto (37.559 habitantes), al sur de la región, señala el "centro geográfico de la península Ibérica".

Hasta los años sesenta, en ese mismo lugar había una gran piedra circular con un aspa en el centro. Era conocida como La Exacta, porque marcaba el centro peninsular. Y hacía referencia a una leyenda que aún se cuenta en Pinto: debajo de ella estaba enterrada un arca en la que los fundadores del municipio guardaron los instrumentos con los que calcularon el centro de la Península.

Este rastro del pasado también se refleja en el escudo oficial de Pinto. Pero sólo desde hace 10 días, cuando el Consejo de Gobierno de Esperanza Aguirre lo aprobó oficialmente. Ahora la enseña legalizada muestra un globo terráqueo y, en él, un punto rojo marca el centro de la península Ibérica. En realidad, la Comunidad se limitó a dar el visto bueno a una petición del Ayuntamiento de Pinto para "rehabilitar su escudo de armas", presentada en 2004 y que desde entonces ha sido objeto de un largo expediente.

El Consistorio elaboró ese año un informe en el que documenta los antecedentes de escudos en la localidad y alude, como referencia más antigua, a un pasaje de un libro sobre heráldica de Antonio Moya, Rasgo heroico, de 1756, en el que escribió sobre el nombre de la población: "Éste le dieron sus primeros moradores con arreglo a el sitio en que la fundaron, el cual se halla en el Punto Céntrico de España, de donde provino en llamar a el sitio que la villa ocupa Punto, y a ella, con muy poca corruptela la nombramos hoy Pinto".

Moya describe también la enseña, de la que ya no quedan vestigios, que utilizaba entonces el municipio, con los elementos que ahora incluye el nuevo escudo: el punto, el globo terráqueo y el fondo de tablero de ajedrez, que en la heráldica se denomina "ajedrezado oro y gules".

Después, Pinto ha utilizado otros dos blasones propios. Uno, de 1948, muy similar al nuevo, salvo que el punto era inapreciable en el globo terráqueo y una corona de laurel rodeaba la enseña. Francisco de Asís Jiménez, responsable del departamento de Imagen Corporativa del Ayuntamiento de Pinto, relata que en 1973 se adoptó un nuevo escudo, que se ideó en una exposición de dibujo. Éste fue el que ha perdurado hasta la nueva solicitud pero que, según Jiménez, no serviría, al no cumplir los requisitos heráldicos. Entre ellos que el escudo tenga una base circular, que es la tradición española, y no puntiaguda, que es la francesa.

Esto es tan importante que hasta el nuevo escudo de Pinto ha tenido que pasar examen en la Real Academia Matritense de Heráldica y Genealogía. "Se aprueba este escudo, sea cual sea lo acertado o no de su origen, ya que viene utilizándose desde al menos 1948, pero con antecedentes en el siglo XVIII", dice su veredicto.

La academia hacía una velada alusión a la disputa que existe sobre dónde está realmente el centro peninsular. Además de a Pinto también se ha atribuido históricamente al Cerro de los Ángeles, en Getafe. Fue la razón de que allí se construyera, en el siglo XX, la gigantesca estatua del Sagrado Corazón. Y Madrid es capital de España desde mediados del siglo XVI por orden de Felipe II, que ordenó delimitar el centro geográfico para establecer allí la Corte del imperio español. Desde el punto de vista científico actual, a los sabios consultados se les fue un poco la mano hacia el norte.

Incluso hoy día calcular las coordenadas geográficas exactas del centro peninsular es una empresa difícil, según una portavoz del Instituto Geográfico Nacional. Supondría, aseguró, utilizar criterios objetivos y teorías matemáticas en las que incluso los científicos no se ponen de acuerdo. "También habría que contar con las mareas, que no son precisas, y con unas fronteras que, sobre todo en Francia, no están científicamente delimitadas", agrega. "Todo eso modifica las coordenadas". Pese a ello, los responsables del instituto aventuran que el punto más próximo estaría en los alrededores de la base del Cerro de los Ángeles. No en la cima, como siempre se ha creído.

Pero Pinto lo que reclamaba en su escudo es el reconocimiento a su tradición histórica. "En 1936 se quemó el Archivo Municipal y tenemos pocas referencias del escudo que se utilizaba anteriormente", explica Jiménez. Conseguido el blasón, el responsable municipal sueña ahora con recuperar el anterior nombre de la calle de la Maestra María del Rosario, que recordaba la leyenda. Se llamaba calle del Arca. Y conducía al origen de Pinto.