_
_
_
_

La policía detiene a tres personas por denunciar robos ficticios

La policía ha detenido a tres varones en los dos últimos días acusados de simulación de delitos. Los tres denunciaron en comisaría robos que no habían sufrido. Nada tenían que ver entre ellos: el primero denunció en Coslada; el segundo, en el barrio madrileño de Moratalaz, y el tercero lo hizo en Torrejón de Ardoz. Los tres transformaron la realidad de sus relatos ante los agentes para cobrar de sus compañías aseguradoras. Finalmente, terminaron por reconocer que la denuncia que habían realizado era una invención que en absoluto se ajustaba a la realidad.

Según fuentes policiales, el cosladeño reconoció que había falseado su denuncia al indicar que había sufrido un robo con fuerza a la salida del gimnasio, perdiendo su GPS, sus raquetas y otros efectos personales. "Los objetos le fueron sustraídos", explicó la policía, "pero no por la fuerza". El acusado reveló que había simulado el atraco para poder cobrar el seguro multirriesgo al que estaba suscrito.

El segundo hombre declaró haber sido atracado a punta de destornillador en una calle de Torrejón de Ardoz por un varón que se apoderó del dinero que llevaba encima. No era suyo, sino de la empresa en la que trabajaba. Cuando acudió a mirar los álbumes de fotografías de sospechosos del robo, se derrumbaron sus declaraciones al admitir que había perdido el dinero que le habían entregado en custodia. La denuncia falsa respondía a su intento de que no le descontasen la cantidad de su nómina.

El último detenido acudió a los agentes de Moratalaz para denunciar que le habían robado la documentación y las tarjetas de crédito, con las que habían sustraído más de 160 euros de sus cuentas bancarias. Cuando los policías indagaron, descubrieron la tramoya: él había gastado el dinero y no se veía capaz de justificarlo. Así pues, decidió denunciar un atraco inventado.

Antecedentes policiales

Los policías sospecharon de la veracidad de las declaraciones de este último detenido y, ante un más exhaustivo interrogatorio y a la vista de sus contradicciones, el ciudadano confesó que había sido él quien había gastado ese dinero. Fue detenido y quedó en libertad con cargos, acusado de denuncia falsa o simulación de delito. En este caso, el arrestado tiene antecedentes policiales: dos de ellos por malos tratos físicos en el ámbito familiar.

Al hilo de estas detenciones, la Jefatura Superior de Policía recordó que, en la mayoría de los casos, este tipo de comportamientos supone un doble ilícito: estafa a la compañía de seguro y también denuncia falsa o simulación de delito, ambos supuestos penados y castigados por el Código Penal. Los fraudes más frecuentes son ocultación de daños o lesiones preexistentes, reclamaciones desproporcionadas y siniestros simulados, la mayoría en el ramo de automóviles y de seguros multirriesgo.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_