AENA deja en manos de las instituciones vascas el futuro del aeropuerto de Hondarribia

La ampliación o no de la pista del aeropuerto de Hondarribia depende de las instituciones vascas. El director de la zona Centro-Norte de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA, el ente gestor de los aeródromos), Jesús Villarroel, lo dejó ayer claro en San Sebastián. Si logran un pacto, la entidad pública, adscrita al Ministerio de Fomento, lo estudiará y "responderá con toda prontitud la decisión tomada". "Alcancen el acuerdo", instó, para subrayar a continuación que "AENA siempre ha dicho que hará lo que la sociedad guipuzcoana demande".

Villarroel realizó estas manifestaciones junto al nuevo director del aeropuerto guipuzcoano, José Manuel Sánchez Losada, tras reunirse ambos con el alcalde donostiarra, Odón Elorza.

AENA ha sacado a concurso las obras para dotar a la pista de las franjas de seguridad que exige la Organización Internacional de Aviación Civil, con lo que perdería 300 metros (de 1.754 a 1.454), lo que podría limitar la operatividad de ciertos aviones.

El ente gestor de los aeródromos tiene previsto realizar estos trabajos porque son los previstos en el plan director diseñado para el aeropuerto por el Ejecutivo central. Dicho plan refleja la voluntad del Congreso, que en 2004, con el voto en contra del PP, rechazó la ampliación de la pista del aeropuerto. Esa ampliación había sido propuesta por el anterior Gobierno popular y encontró el rechazo tanto de los vecinos como de las instituciones vascas por sus afecciones medioambientales y urbanísticas.

Cambios de posición

Luego las posiciones empezaron a cambiar, porque la aplicación de las franjas de seguridad suponen en la práctica acortar la pista. La Diputación y el consistorio donostiarra apuestan claramente por ampliar la pista esos 300 metros.

El Ayuntamiento de Irún aceptaría esta vía si alcanza un acuerdo urbanístico con la institución foral. En cambio el de Hondarribia no ve con buenos ojos la ampliación. Y en el Gobierno vasco las posiciones están algo divididas, pues Medio Ambiente plantea dudas.

Así las cosas, la única vía para que AENA cambie sus planes de acortar la pista pasa porque las instituciones vascas alcancen un acuerdo. Luego, a través de sus respectivos partidos, tendrían que trasladar el asunto al Congreso, que a su vez instaría al Gobierno a cambiar de nuevo el plan director del aeropuerto, según insitió ayer Elorza.