"Esto no sucede ni en Tanzania"

La Federación Española de Fútbol (FEF) presentó ayer un requerimiento en la Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS)

para que dictamine sobre el conflicto que le enfrenta al Granada 74 y la Liga de Fútbol Profesional (LFP). Estos últimos defienden el derecho del equipo andaluz a jugar esta temporada en Segunda División tras comprar las acciones del Ciudad de Murcia.

La FEF responde así a la decisión tomada el lunes en Zurich por la UEFA y la FIFA -en una reunión mantenida con Angel Villar (presidente de la FEF) y José Luis Astiazarán (presidente de la Liga)-, que mantuvieron su exigencia de suspender al Granada 74 y recomendaron el arbitraje del TAS. Sin embargo, la federación tiene complicado conseguir que Granada 74 y Liga se presenten ante el citado tribunal: "El TAS no tiene competencia para dictaminar si la FEF está incumpliendo el ordenamiento jurídico español", aseguró ayer Carlos Marsá, presidente del Granada 74.

Según Marsá, la compra del 100% de las acciones del Ciudad de Murcia y el cambio de domicilio a Granada -motivos que aduce la FEF para negar la inscripción del club-, están "perfectamente contempladas" en la Ley de Sociedades Anónimas. "La federación quiere incumplir la ley", señala el presidente del club, que también recuerda que el Consejo Superior de Deportes (CSD) "está por encima de cualquier federación deportiva" y que ningún organismo puede incumplir sus decisiones. Incluso va más allá. "Si el Rey, el presidente Zapatero, y todos los que vamos detrás, debemos cumplir las leyes, ¿por qué la federación puede incumplirlas? Esto no sucede ni en Tanzania". De momento el CSD no se ha manifestado porque el secretario de Estado para el deporte, Jaime Lissavetzky, está de vacaciones hasta mañana.

Marsá dice encontrar dos motivos para que la FEF rechace su plaza. El primero, "la lucha permanente entre la Liga y la federación ", y el segundo, que a la federación le corresponde el 15% de la cifra pagada por la venta de la plaza de un equipo, según el convenio que firmó con la Liga. "Aunque en este caso no le corresponde", dice Marsá; "porque el Granada 74 no compró la plaza del Ciudad de Murcia, sino el 100% de sus acciones".

Por su parte, el vicepresidente de la LFP, Javier Tebas, declaraba ayer que sólo acudirían al arbitraje "si UEFA y FIFA reconocen antes al Granada 74 como equipo de Segunda". En todo caso, no parece que esto pueda suceder antes del jueves, la fecha que previsiblemente establecerá el TAS para anunciar su decisión. "La LFP dudaba si debía acudir", explica Marsá; "pero yo no tengo ninguna duda. Me niego a ir. Yo no reculo ni acepto la injusticia".

Quien tampoco recula es la federación. El máximo organismo del fútbol español señaló ayer en un comunicado que la Liga "demostraría una absoluta falta de razón en sus argumentos si no se presenta ante el TAS". Y Jorge Carretero, portavoz de la federación, recalcó ayer varias veces a este diario que si Granada 74 y Liga no acuden al arbitraje del tribunal, "es su problema" porque la FEF "se atendrá a lo que diga el TAS".

El Granada 74 juega su primer partido en Segunda División el sábado a las 20.00 contra el Cádiz. La federación ya ha advertido de que no enviará árbitro al partido. Y la Liga, en respuesta a la decisión de la federación, anunció que paralizaría la Segunda División si fuera necesario. Marsá cree que Cádiz marcará el punto de inflexión. "Si el sábado a las 20.00 el árbitro no está en el campo, la federación se habrá metido en un jardín tremendo", afirma el presidente del club granadino. "Pero yo sigo convencido de que finalmente se disputará el partido".