Los empresarios demandan trabajadores extranjeros más cualificados

La secretaria de Estado de Inmigración y Emigración, Consuelo Rumí, no cree que se haya producido un agotamiento de la demanda de trabajadores extranjeros por parte de empresarios españoles, aunque admite que el "mapa laboral" está cambiando. "De momento, sigue habiendo una demanda para el sector agrícola y la construcción, pero también debo decir que cada día más hay más peticiones de trabajadores con un perfil medio y alto de cualificación. Estamos muy atentos a la evolución que pueda tener en el mercado laboral la demanda de trabajadores", asegura.

En una entrevista con Europa Press, Rumí señala que ahora vienen personas de países que antes no eran emisores de trabajadores inmigrantes. Además, algunos ciudadanos de estados incorporados a la UE siguen siendo demandados para ciertos trabajos, como rumanos y búlgaros, que están preparados para empleos de perfil de media cualificación. Junto a ellos, también están siendo demandados ciudadanos de países asiáticos de media y alta cualificación.

"La construcción y la agricultura siguen teniendo demanda de países de tradición migratoria, y algunos de ellos incluso avanzando. Por ejemplo, todo el trabajo de temporada se ha hecho un circuito que está dando muy buen resultado, sobre todo el vinculado a la fresa con trabajadores procedentes de Marruecos", asegura. En su opinión, se ha producido un salto cualitativo en cuanto a la confianza generada en el sector para contratar trabajadores marroquíes, pero también cuantitativo: si en 2003 vinieron 95 trabajadores de temporada desde Marruecos, en 2007 la cifra supera los 5.700.

Generar confianza

"Esto pone de manifiesto cómo generando confianza entre los trabajadores y el sector empresarial damos esa señal inequívoca a las mafias. Se está poniendo de manifiesto que esto funciona, que la vía de la inmigración legal funciona", recalca.

Junto a la contratación legal, el Gobierno, asegura, luchará "continua, constante y contundentemente" contra la inmigración clandestina, aunque la secretaria de Estado reconoce que siempre "habrá un tanto por ciento de personas que llegan a España de forma irregular".

Durante el primer semestre de este año han llegado a España de forma legal, con un contrato de trabajo, más de 200.000 personas. "Cada vez es más el número de personas que viene con un contrato en origen y cada vez menos las que vienen a través de entradas irregulares", afirma Rumí, quien añade que también son cada vez más los inmigrantes irregulares repatriados. "El objetivo nunca se cumplirá hasta que el flujo de clandestinidad sea mínimo", concluye. Rumí resalta que, "afortunadamente", sólo hay una minoría de españoles a la que no les gusta este tipo de sociedad multiétnica. "Tendrán que acostumbrarse porque, lo quieran ellos o no lo quieran, la sociedad del futuro es ésa".