Conciertos y discapacitados
Leo con verdadera envidia (sana) la crónica de Juan Cruz, desde Elche, del recital de Serrat y Sabina. Pero quiero comentar por qué no he podido asistir al mismo; Serrat o Sabina seguro que no lo sabrán y, dado como son, es posible que para el futuro lo puedan arreglar, por su humanidad y proximidad con la gente.
Soy discapacitado y tengo algunos problemas para asistir a estos eventos multitudinarios; por eso intenté comprar entradas al precio que fuera con tiempo, solicitando si existía alguna zona de fácil acceso para personas discapacitadas.
El Corte Inglés de Alicante no lo sabía; escribí al organizador de la gira, Berry Producciones, y me dijeron que lo intentara con el organizador de Elche; el patronato de deportes de Elche tampoco. El patrocinador del espectáculo en Elche me dice que si voy en silla de ruedas hay una zona, pero que no hay sillas para sentarse, lavándose las manos de una forma educada pero poco convincente.
En fin, que no pude ir, y, claro, tendré que esperar a que vuelvan por Elche o Alicante, ya que actualmente vivo en Santa Pola; eso sí, como voy envejeciendo, ya estaré en silla de ruedas y no habrá problema. ¿No cree que a estas alturas estas situaciones tendrían que estar resueltas? Bueno, me queda el recuerdo de cuando podía acudir a los campos de fútbol o plazas de toros a ver a estos dos amigos, porque así los considero, y oír sus discos.
