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45 personas llevan cinco días desalojadas de sus casas en El Prat por daños en los cimientos

Una vecina lamenta que sólo ha podido ir a su domicilio unos minutos dos veces al día

Un total de 45 personas han sido desalojadas de sus casas en El Prat de Llobregat. Ya llevan cinco días fuera de sus viviendas. Los cimientos de los dos bloques de pisos donde viven, en los números 122 y 124 de la calle de Barcelona, se vieron seriamente dañados debido al desplazamiento de tierra que se produjo, al parecer, a causa de una excavación cercana. Los vecinos, que viven en hoteles, están a la espera de que una empresa contratada por el Ayuntamiento de El Prat finalice las comprobaciones y las reparaciones necesarias en la estructura de los inmuebles.

"Llevaban muchos días sacando tierra y agua. Nosotros estamos convencidos de que ha sido por culpa de esta excavación", asegura Baldiri Segarra, que vive en los bajos del 122 y es dueño del aparcamiento de la planta baja del mismo edificio. En este aparcamiento apareció el pasado viernes por la mañana un gran agujero, que dejaba una de las paredes maestras suspendida en el aire, debido al hundimiento de parte del suelo.

Los bomberos consideraron que existía riesgo de derrumbe y ordenaron el desalojo de inmediato. "Fue una día de nervios y de gritos", asegura Baldiri, que tuvo que interrumpir sus vacaciones cuando una llamada de su sobrino le informó de lo ocurrido. Su prima, Pepita Serra, que vive en el 124, recuerda que en el momento del desalojo "algunos vecinos todavía estaban dormidos y tuvieron que bajar en pijama". Desde entonces han podido acceder a sus casas "sólo durante cinco minutos, dos veces al día", dice Serra. Suben por turnos y un miembro de la Policía Local, que custodia la entrada de los edificios, se queda con su DNI hasta que bajan.

En ambos edificios han realizado apuntalamientos de urgencia y el gran agujero del aparcamiento del 122 ya ha sido rellenado de hormigón. Actualmente, ya no existe peligro de derrumbe, pero queda por saber el estado actual del subsuelo. La empresa encargada de revisar los cimientos empezó ayer las perforaciones que permitirán conocerlo.

Todo apunta a que la excavación sospechosa de haber originado el problema, llevada a cabo por una empresa constructora justo detrás del inmueble, en la calle de Cataluña, arrastró gran parte del terreno sobre el que estaban apoyados los cimientos de los edificios desalojados.

El terreno de la zona es muy húmedo y los vecinos afectados creen que la constructora no lo tuvo en cuenta. Baldiri Segarra lo tiene claro: "Para realizar una excavación en este terreno hay que tomar muchas medidas de seguridad. Ellos han estado excavando a mucha profundidad y no creemos que hayan tomado las precauciones necesarias".

Las familias, que están acogidas en tres hoteles de la localidad, ya han acordado presentar una denuncia conjunta por daños y perjuicios. "Queremos que sea un juez quien dictamine si realmente esta empresa es la responsable".

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