Interior vincula al etarra fugado en Castellón con el que huyó en Huelva

La Guardia Civil ha confirmado esta semana que el etarra que logró huir el pasado 21 de junio de Ayamonte (Huelva) tras abandonar un coche cargado con 130 kilos de explosivo, Ander Mugica Andonegi, de 24 años, dejó también una huella dactilar en un folio que los agentes del instituto armado hallaron en la bolsa de deporte que abandonó el terrorista en un taxi en la localidad de Torreblanca (Castellón) el pasado día 19.

Esta prueba irrefutable relaciona ambos hechos y hace pensar a los investigadores que el terrorista de ETA es el mismo o, en su defecto, participó en ambos hechos. La Guardia Civil encontró la huella de Mugica Andonegi en uno de los retrovisores del vehículo abandonado por los terroristas en Ayamonte, según confirmaron a este periódico fuentes de la investigación.

El vehículo fue abandonado cerca de la frontera con Portugal, donde al parecer el comando tenía previsto instalar la base logística para iniciar la campaña de verano contra intereses turísticos.

Pese al dispositivo desplegado por las Fuerzas de Seguridad del Estado en la provincia de Castellón durante la semana pasada para atrapar al terrorista que abandonó el taxi y dejó en su interior una bolsa de deporte con material para fabricar bombas lapa, lo más probable es que el activista de ETA haya conseguido ponerse a salvo. El movimiento de decenas de miles de personas por el festival de Benicasim puede haber facilitado la huida del terrorista.

Por otra parte, ayer fueron trasladados a París los tres miembros del aparato logístico de ETA detenidos en una casa en Rodez el pasado jueves, aunque aún no han pasado a disposición judicial.