Marcos impone su criterio a costa de su destitución como líder de Compromís

Glòria Marcos consiguió ayer que el pleno de las Cortes Valencianas eligiera al coordinador de EU de Valencia ciudad, Amadeu Sanchis, como representante del grupo de Compromís pel País Valencià en el consejo de administración de Ràdio Televisió Valenciana. Pero pagó un alto precio por ello, no sólo porque la mayoría del grupo, conformada por los dos diputados del Bloc Nacionalista Valencià y las dos representantes de Esquerra i País (EiP), la corriente nacionalista de EU, mantuvieron que la relevarán como portavoz, sino porque el disgusto le costó un desvanecimiento en el hemiciclo.

La imagen de una Glòria Marcos tendida en el suelo del hemiciclo de las Cortes, justo delante de los escaños del Consell, donde cayó de bruces como consecuencia de un desvanecimiento tras ejercer su voto, y atendida por el consejero de Sanidad, Manuel Cervera, la diputada popular Alicia de Miguel, también médico, y la parlamentaria socialista Consuelo Catalá, enfermera de profesión, además del médico de la Cámara, y rodeada de parlamentarios, era, poco antes de las 11 de la mañana de ayer, el patético resumen de la crisis que ha acabado con la aventura de la coalición de Compromís pel País Valencià cuando apenas había empezado a trabajar.

Marcos sufrió el desvanecimiento, que no tuvo mayores consecuencias y que se atribuyó a la tensión que la veterana dirigente ha sufrido en las últimas horas, cuando regresaba a su escaño después de votar para elegir a los representantes de las Cortes en el consejo de administración de RTVV. La Mesa de las Cortes había decidido poco antes no tramitar el escrito presentado a última hora del lunes por los cuatro diputados de la mayoría del grupo de Compromís, en el que se comunicaba la decisión de relevar a Marcos como portavoz. Y había dado por buena la propuesta de candidato al consejo del ente público firmada por la síndic, obviando la candidatura presentada por aquellos.

Tras la decisión de la Mesa, populares y socialistas ofrecieron a Marcos y a Enric Morera, portavoz adjunto de Compromís y secretario general del Bloc, la posibilidad de aplazar la elección del representante de Compromís en el consejo de RTVV, para que pactaran un candidato común. Pero, con la resolución de la Mesa en la mano, que le garantizaba la victoria -la elección de Amadeu Sanchis, coordinador de EU en Valencia como consejero- Marcos rechazó la oferta.

El precio que Marcos pagará por esa victoria será alto. No sólo porque perderá su condición de portavoz en una reunión convocada ya para el lunes, según confirmó ayer Morera, sino porque la ruptura definitiva en el seno del grupo parlamentario que conlleva esa decisión tendrá su reflejo en el pacto que alumbró la coalición de Compromís, así como en la propia organización que dirige: EU está también definitivamente tocada y su actual dirección, seriamente cuestionada, tanto por EiP -que representa el 27% de la formación y que ha anunciado su intención de constituirse como partido político después del verano- como por el colectivo Projecte Obert que lidera el anterior portavoz parlamentario, Joan Ribó, que suma otro 16% y ha pedido la dimisión de Marcos.

Junto a Amadeu Sanchis, el consejo de RTVV estará integrado, por seis representantes del PP, que sólo mantiene a Emilio Fernández, al que acompañan Miquel Domínguez, Juan de Dios Navarro, Lucía Esteban, Alfredo González Prieto y Paz Ferrín, esposa de Víctor Campos, y cuatro del PSPV, que mantiene a José Ignacio Pastor, Miguel Mazón y Dolores López y coloca a Fina Nicolás, compañera del dirigente alicantino Ángel Franco.