85 euros por un pino del jurásico
El Jardín Botánico planta un árbol que se creía extinguido y que servía de alimento a los dinosaurios hace 146 millones de años
El Jardín Botánico de Madrid tiene, desde ayer, un nuevo inquilino. Se llama Wollemi: una especie de pino que hasta mediados de los noventa se creía extinguida en el periodo cretácico -hace 146 millones de años-.
Pero no. En septiembre de 1994, un guardacostas australiano encontró 40 ejemplares en el bosque del Wollemi Nacional Park, en Nueva Gales del Sur, a 150 kilómetros de Sydney. Ahora, después de un proceso de reproducción in vitro realizado a 15 de los ejemplares encontrados, los jardines botánicos lo pueden comprar por 85 euros.
Esto fue precisamente lo que le costó al de Madrid adquirir las semillas y esquejes del ejemplar que se plantó ayer. "Aunque dentro de poco, lo podrá comprar cualquiera", afirmó una portavoz del Jardín. La comercialización del Wollemi está permitida a través de viveros autorizados por el parque natural australiano. "Los fondos que se consigan se dedicarán a los trabajos de conservación de la especie", indicó el director del Real Jardín Botánico de Madrid. De todos modos, "ya se está vendiendo en la red, pero de manera ilegal", añadió una portavoz del Jardín.
"El Wollemi era la comida de los dinosaurios en el jurásico, hace casi 200 millones de años", explicó Mariano Sánchez, jefe de la unidad de horticultura del Jardín Botánico de Madrid. Hasta ahora, el árbol sólo se conocía por el registro fósil. "Es como si se hubiera descubierto un ejemplar vivo de tiranosaurio", explicó el director del Jardín, Gonzalo Nieto.
Desde que se encontraron los ejemplares vivos de Wollemi, sus semillas ya han viajado varias veces a Europa. Hay ejemplares de este pino en Barcelona, Portugal, Milán y Frankfurt. Su cultivo en Madrid será complicado: "El Wollemi no soporta el sol del verano y es sensible a las bajas temperaturas", apuntó Nieto. "Puede que lo acabemos instalando en el invernadero", añadió. De momento, está en la zona de las gimnospermas -plantas que forman semillas pero que carecen de flores-: "Un rincón protegido de la luz solar directa", explicó Nieto.
El pino Wollemi -que debe su nombre al bosque del parque natural australiano donde se encontró- pertenece a la familia de las araucarias, según explicó el director del Jardín Botánico. "Tiene hojas perennes de color azulado y una corteza parecida a los cereales de chocolate", afirmó Nieto. Y añadió: "Los árboles de esta especie pueden alcanzar los 40 metros de altura, pero con las condiciones climáticas de Madrid, sólo llegará a los 20 o 30 metros".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.