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León se declara "traicionado" al dimitir como alcalde de Vilagarcía

El Partido Popular podría plantear la nulidad de la lista socialista

Estaba claro que Enrique León no dimitió como alcalde de Vilagarcía el pasado sábado porque preparaba en la recámara el discurso de despedida. Ayer lo hizo, y aunque ajustándose a los párrafos de un escrito que fue leyendo a los medios de comunicación presentes, León no pudo ocultar la cara amarga de su dimisión que, aclaró, "no tiene motivos jurídicos sino políticos".

León prefirió dejar para el final las valoraciones críticas que precipitaron su dimisión, después de que la Junta Electoral Central planteara su inelegibilidad como candidato a las elecciones. "Utilizando esa transparencia a la que tantas veces hice referencia a lo largo de la campaña electoral, pienso que no puedo continuar como alcalde. Mi honestidad y mi dignidad no me lo permiten. Sobre todo, cuando no cuento con el apoyo de una parte importante de los dirigentes locales y provinciales del PSOE", declaró.

Para el ex comisario y candidato independiente en las listas del PSOE, hoy era el momento de su decisión final "porque, a pesar de lo que opinen los demás, los tiempos de mis decisiones los marco yo". León, que ya había presentado su renuncia en el registro del ayuntamiento, dijo que lo había hecho a pesar de que "la razón jurídica, que para mí es lo que prima, está de mi parte".

El dimisionario alcalde, licenciado en derecho, incidió una vez más en el dictamen de la Junta Electoral "que ha dejado bien claro que si alguien no está de acuerdo con mi elección, recurra a la jurisdicción ordinaria, y ella será la que pronuncie la última palabra". León retó al Partido Popular a interponer un recurso por la vía de lo contencioso administrativo para demostrar la legalidad de su elección.

León fue un poco más allá cuando, fuera del Ayuntamiento, le despidieron algunos periodistas. "Me dejaron en la estacada y me siento traicionado", refiriéndose al coordinador provincial del PSOE, Modesto Pose, que en su día le pidió que encabezara la lista. "No es mi estilo arremeter contra nadie y afronto mi situación con ánimo", comentó.

Apoyado por muchos compañeros socialistas, Enrique León recibió el respaldo de algunos dirigentes y alcaldes, como el de Santiago, contrarios a las "intrigas de grupúsculos políticos". León tuvo palabras de elogio sólo para la más que probable alcaldesa de Vilagarcía, Dolores Dorgambide.

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El nacionalista Xosé Castro Ratón, que se convirtió en sucesor provisional de León como primer teniente de alcalde, tuvo palabras de apoyo hacía el comisario.

Por si la crisis en las filas socialistas no fuera suficiente, ayer el PP anunció que podría plantear la nulidad de toda la lista socialista por la vía de la jurisdicción ordinaria y convocar otras elecciones. Su portavoz, Tomás Fole, dijo que esta interpretación tiene una base jurídica razonable aunque habría que esperar al dictamen último que emita la Junta Electoral de Zona de Cambados. Fole dijo que la situación de Enrique León "no tenía otra salida ante las dudas de su elección y porque el gobierno municipal está paralizado y hay que transmitirle tranquilidad a los ciudadanos".

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