Sólo el 14% de los catalanes usa el transporte público

El transporte privado sigue ganando la partida al público. Esa es una de las conclusiones que se extraen de la Encuesta de Movilidad Cotidiana de 2006, un documento doblemente valioso: se basa en encuestas a 106.000 personas, una cifra muy alta para este tipo de estudios; y su campo de acción se extiende por primera vez a toda Cataluña. Hay una cifra que destaca por encima de las demás: los catalanes realizan unos 150 millones de desplazamientos a la semana. Sin embargo, sólo el 14,3% usa habitualmente el transporte público, frente al 40,6% que prefiere utilizar su vehículo privado. Aunque hay una buena noticia para los sensibilizados con el medio ambiente: el 45,1% de los entrevistados afirman que se desplazan a pie o en bicicleta.

Los desplazamientos se hacen mayoritariamente por motivos personales, por encima del trabajo o los estudios

El 40,6% utiliza habitualmente el vehículo privado, cifra superada por el 45% que dice que camina o va en bici

Cada persona percibe que se gasta 25 euros de media en transporte público y 100 en privado "No se ha acabado el tiempo de la carretera. Pero el modelo no es ilimitado", dijo Nadal

Una encuesta revela que los catalanes realizan unos 150 millones de desplazamientos a la semana

"No se ha acabado el tiempo de la carretera. Pero los catalanes deben entender que ese modelo de transporte no es ilimitado. Desde la Administración tenemos la obligación de estimular la atracción del usuario por el transporte público. Por ejemplo, hay que potenciar el transporte ferroviario", afirmó el consejero de Política Territorial y Obras Públicas, Joaquim Nadal, durante la presentación de la encuesta. "Tenemos una excelente herramienta para detectar los problemas de movilidad en Cataluña y ponerles solución. Es bueno disponer de criterios actualizados para decidir dónde debemos construir una escuela o un hospital", dijo el consejero.

Los catalanes se inclinan por el vehículo particular, y además lo usan prácticamente solos. Según la encuesta de movilidad, la media de pasajeros que va en cada coche es de 1,22 personas en días laborables. En fin de semana la cifra aumenta a 1,44. "Las administraciones y las empresas deben fomentar el uso del vehículo compartido. Sobre todo en el caso de ciudadanos que se dirigen al mismo polígono industrial a trabajar y a la misma hora. Todo eso es posible", señala Ole Thorson, ingeniero y experto en movilidad sostenible.

Thorson asesora a municipios y ayuntamientos para que desarrollen sistemas de movilidad sostenible en sus ciudades, y cree que la mejor noticia de la encuesta es ese 45,1% de ciudadanos que caminan o cogen la bicicleta: "Se confirma una tendencia que se veía venir desde hace algún tiempo y es muy positivo que esta manera de desplazarse supere al vehículo particular. Pero aún hay mucho por hacer para mejorar el transporte público en las vías urbanas. Por ejemplo, no nos podemos permitir tener un servicio de Cercanías que se rompa cada dos días", añade Thorson.

De hecho, entre los motivos que la población expresa para utilizar el transporte público, aparece en cuarto lugar el "menor impacto ambiental". Los adictos al coche particular, por su parte, se excusan en el ahorro de tiempo o en la inexistencia de alternativas. Como cabría esperar, Barcelona y su área metropolitana es la zona de Cataluña donde más se utiliza el transporte público, el 18,6%; sin embargo, el 35% usa el coche.

Las personas encuestadas dicen tener la percepción de que un ciudadano destina 25 euros mensuales al transporte público de media, y más de 100 euros al transporte en vehículo privado.

Uno de los datos de la encuesta que más pueden sorprender es que los catalanes se desplazan más por motivos personales -ir de compras, al médico, pasear- que por razones ocupacionales -ir a trabajar o a estudiar-. En estos dos últimos casos también el transporte privado es el preferido por los catalanes. "Está claro que se debe mejorar el transporte público, sobre todo en los municipios más pequeños. El éxito de la bicicleta en Barcelona demuestra que si un Ayuntamiento propone una alternativa al coche, los ciudadanos la acogen muy favorablemente", explica Xavier Abadia, responsable de Movilidad de la Fundación RACC.