Los niños, primero
El 10 de mayo el Consejo Audiovisual de Andalucía (CAA) dictó una resolución sobre una queja presentada a propósito del programa Menuda noche y, en concreto, de uno de los espacios que lo integran, Menudo barrio. Al consultar el documento he comprobado que de las siete resoluciones emitidas este año las tres últimas están relacionadas con los menores: su utilización en programas que se emiten en horario nocturno, la programación de producciones dirigidas al público infantil pero absolutamente inadecuadas o la proyección en horario infantil de productos pensados para un público adulto. ¿No les llama la atención que no haya una sola queja relativa a la programación que Canal Sur piensa y emite para adultos? ¿Hay que interpretar ese silencio como fruto de la resignada impotencia o como asentimiento indoloro a lo que se nos administra a diario?
Las tres quejas relacionadas con los menores tienen su envergadura. La penúltima, del 23 de abril, repite por enésima vez lo que el Defensor del Espectador ya ha leído muchas veces en las cartas que recibe: en el programa La Banda se mezclan producciones dirigidas a edades muy distintas y entre ellas se cuelan cosas como la serie sobre una familia "integrada", dice el CAA, "por un padre completamente estúpido, un hijo mayor semejante, una madre dulce y cariñosa y un hijo pequeño que es un genio". La canción de la serie termina así: "Vuestro padre es un matao. Pues si vas de honesto te tendrán por un pringao". La serie es japonesa, como el 34% de las series de animación que se ven aquí, en las que suele haber una violencia representada de manera paroxística; les siguen las series norteamericanas, con el 25%. Pero el 30 de marzo anterior el director general de la RTVA envió al CAA un informe en el que sostenía que los espacios que integran La Banda fomentan "valores como el amor, el conocimiento de Andalucía, de nuestra cultura y señas de identidad"; ¿alguien lo había dudado? La otra queja roza lo chusco: Radio Aljarafe Televisión proyectó en horario infantil la película española de 1978 El fascista, la beata y su hija desvirgada.
Lo que no entiendo es el libro de estilo del CAA: se enfrentan a barbaridades de un tono más que superlativo y responden, en el caso de la queja sobre Menuda noche, desestimando la misma y mostrando su preocupación por los efectos que estas cosas pueden tener en los niños. Salta a la vista la desproporción que hay entre esta respuesta y los desmanes de que se habla, a propósito de los cuales hay todavía que plantear una última pregunta: ¿qué manera hay de saber lo que la RTVA acaba haciendo con las ponderaciones y preocupaciones del CAA? ¿No tendría que salir alguien a contar la bronca que les han echado y la decisión finalmente adoptada? No pueden no contestar. Ni responder con vaguedades cuya simpleza ofende.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.