La Zona Franca de Cádiz se simplificará para mejorar su gestión
La Zona Franca de Cádiz afrontará en los próximos meses la que se considera su reestructuración más importante de los últimos años. Los responsables del recinto fiscal gaditano acabarán con la división en una veintena de sociedades de difícil control, tal y como han alertado la Abogacía del Estado y el Tribunal de Cuentas, y se centrará en su labor inversora a través de una única sociedad: Desarrollos Empresariales de la Zona Franca de Cádiz (S.A.).
El pleno del comité ejecutivo acordó estas medidas de reorganización en virtud del informe del Tribunal de Cuentas sobre la última etapa del PP entre 2001 Y 2004, que alertaba de la falta de control sobre varias sociedades dependientes del recinto fiscal. Esa reestructuración también se plantea por las advertencias realizadas por la Abogacía del Estado.
La nueva Zona Franca será más simple. El árbol de su organigrama apenas tendrá ramas. La gestión principal del recinto fiscal será llevada por una única sociedad: Desarrollo Empresariales de la Zona Franca S.A., una denominación que sustituirá la de Sociedad General de las Bahías de Cádiz y Algeciras S.A., que era la que se encargaba de desarrollar todas las actividades de servicios para impulsar infraestructuras que permitan implantar empresas en el entorno de la provincia de Cádiz, a través de la promoción de suelos o edificios. Es el brazo inversor del recinto fiscal gaditano. Al mismo tiempo el recinto fiscal liquidará muchas sociedades que permanecían inactivas pero acumulando costes.
La máxima de estos cambios, además de para ahorrar gastos, será mejorar la transparencia del organismo y facilitar su control. "Habrá una única sociedad y el consejo de administración tendrá miembros del pleno y del comité ejecutivo por lo que la garantía de información está asegurada", explicó ayer el delegado del Estado en la Zona Franca, el socialista José de Mier. Esta nueva etapa contrastará con la anterior, cuando eran gestores los delegados del PP Manuel Rodríguez de Castro o Miguel Osuna. El Tribunal de Cuentas y la investigación judicial que sigue su curso en los juzgados de Cádiz tratan de aclarar la creación de sociedades como Rilco o Quality, que escapaban del control de la Zona Franca, y sirvieron para cerrar contratos millonarios que han ocasionado un importante agujero económico a las arcas del recinto fiscal gaditano.
Habrá varias unidades de negocio dedicadas a gestionar aparcamientos, servicios documentales, energías renovables y un centro de servicio a empresas. La Zona Franca sólo creará sociedades mercantiles añadidas cuando los proyectos estén participados por otros.
