El 'comando' de ETA que robó las pastillas inflamables quería llevarse un gran lote

El comando de tres pistoleros de ETA que robó 44 kilos de pastillas inflamables el martes pasado en el pequeño municipio francés de Bischoffsheim (Alsacia), cerca de Estrasburgo, pretendía llevarse una partida de este material muy superior a la que finalmente pudo lograr. Ésta es la primera hipótesis que maneja la policía francesa que investiga el robo.

El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, indicó ayer que "no hay datos nuevos" en relación con la sustracción de un material que puede ser utilizado para fabricar explosivos (triperóxido de hexametileno-DTHM). La célula islamista que atentó el 7 de julio de 2005 en Londres utilizó este material para fabricar el explosivo que colocó en el metro y en el autobús.

Este material también sirve, según los expertos, para reforzar un explosivo convencional. En cualquier caso, Rubalcaba negó que ese tipo de pastillas fuese empleado por ETA en el atentado de la T-4 en Barajas. La carga empleada por ese comando en el atentado del 30 de diciembre "era un explosivo amónico y un reforzante de explosivo militar", precisó el ministro del Interior.

Rubalcaba añadió que la policiá francesa sigue trabajando en las pesquisas y que "la hipótesis de trabajo en la que la policía se mueve es que es ETA. Iban a robar más kilos y se encontraron con que no había. Esa es la hipótesis más plausible", informó el titular de Interior.

Por otra parte, desconocidos realizaron ayer unas pintadas en Vitoria en la que aparecía el apellido del presidente del PNV, Josu Jon Imaz, dentro de una diana. Es la primera vez que el entorno de ETA realiza una pintada así contra un presidente de esta formación política. Muy cerca de esta diana, otra pintada amenazante decía en euskera "PNV-PSOE ordainduko duzue" (PNV-PSOE lo pagaréis).

Tras la ruptura del alto el fuego, los analistas policiales sitúan al PNV y a la Ertzaintza como objetivos preferentes de los terroristas.