Ciutat Vella rejuvenece, mientras que el Eixample gana en edad

Ciutat Vella está rejuveneciendo, mientras que el Eixample envejece. La población mayor de 65 años en el corazón de la ciudad representa el 17,2%, la menor de toda la ciudad. Todo un cambio -en un distrito que hace una década peinaba muchas canas- que tiene su origen en la inmigración, que supone el 37% de su población en la actualidad. Por el contrario, los mayores de 65 años en el Eixample son casi el 40% de los residentes.

En Sarrià, que es el distrito más joven, el 15% de la población tiene menos de 15 años

Estos datos los expone la memoria del Consejo Económico y Social de Barcelona (CESB) -un órgano asesor del Ayuntamiento que reúne a representantes de organizaciones empresariales, sindicales y sociales-, que recoge la radiografía de la ciudad de 2006.

Los mayores contrastes se dan en la población y el nivel de estudios. Ciutat Vella es el distrito donde hay más potencial de población activa y en el que los menores de 15 años representan el 9,3%. En el lado opuesto, y con la mayor concentración de niños y adolescentes, está Sarrià-Sant Gervasi, con el 15,2%. Ese distrito es, con diferencia, el que tiene más residentes con estudios superiores: el 56,5%. Por el contrario, esta formación sólo la tienen el 19,9% de la población de Nou Barris y el 22,4% de los residentes en Ciutat Vella.

El peso de los menores de 15 años y los mayores de 65 marca el conjunto de población que se considera dependiente. Las estadísticas evidencian que el distrito con más dependencia es Sarrià-Sant Gervasi, donde lo es el 55,7% de sus habitantes, seguido del Eixample con el 50,5%. Pero esta dependencia tiene signo contrario: en Sarrià se origina por el predominio de niños, mientras que en el Eixample es por la legión de personas mayores de 65 años. El 16,7% de sus residentes tiene entre 65 y 79 años, y el 21,3%, más de 79. Es decir, que prácticamente el 40% de los residentes en el distrito más poblado de la ciudad tiene más de 65 años. Estadísticas al margen, este hecho se nota en la mayor parte de las comunidades de vecinos del Eixample.

Nou Barris, el distrito que se formó por las oleadas de inmigración española en las décadas de los años cincuenta y sesenta, es el segundo distrito de la ciudad que más envejece.

Otros indicadores demográficos apuntan, por ejemplo, que la esperanza de vida de un ciudadano de Barcelona es de las más altas del mundo: 80 años. La mayor tasa de natalidad se da en Sarrià y Sant Martí y la más baja en Les Corts. La de mortalidad más elevada es la del Eixample.

En cuanto a nivel de estudios, además de Sarrià, los distritos que tienen más del 40% de población con estudios superiores son Eixample, Les Corts y Gràcia. En el resto de los distritos, el nivel mayoritario es la enseñanza obligatoria, con valores que oscilan entre el 41,3% de Horta y el 49% de Nou Barris. Es en el capítulo de estudios donde los representantes del Consejo Económico y Social de Barcelona subrayan la brecha existente entre la enseñanza universitaria y la profesional y técnica: "Tenemos 60.000 estudiantes de Formación Profesional frente a 200.000 universitarios", señala Agustí Bonavía, de Fomento del Trabajo, quien opina que esa gran diferencia no tiene ninguna lógica precisamente porque hay una gran demanda laboral de técnicos y profesionales cualificados.

"Los indicadores económicos de la ciudad en 2006 fueron buenos, pero hay problemas que destacar", apunta la presidenta del CESB, Rosa Virós. Pone como ejemplo la temporalidad de la mayor parte de los contratos laborales firmados en 2006, que representaron el 83,5% frente al 16,5% de contratos fijos. Pese a que el índice de paro se considera técnico, el CESB alerta de que hay un colectivo de desempleados alto: el 15,4% de la población que no tiene estudios está en paro.

El CESB también alerta del problema de la vivienda en una ciudad en la que, además, prácticamente en uno de cada cuatro hogares sólo vive una persona. En el conjunto de la ciudad son unipersonales el 26,2%, un porcentaje que llega al 38% en Ciutat Vella, seguido por Gràcia con el 30,8% y el Eixample con el 30,2%. Los hogares donde reside una madre con sus hijos -que son mayoritarios entre los monoparentales- son el 15,4% de la ciudad.