"Nosotros ponemos la pelota al piso"

"Nosotros nunca colgamos balones", dice Joselito Vaca al teléfono, echado en una tumbona junto a sus compañeros, en el hotel Castillo de la Fantasía, en San Cristóbal. El media punta de la selección de Bolivia disfruta de un día de descanso tras empatar con Venezuela (2-2) en la jornada inaugural, el martes. Se siente feliz porque considera que su selección ha puesto el listón de la calidad bien alto.

Vaca lleva el número 10. Como mandan los cánones. En Bolivia todo es académico. Desde la asignación de los dorsales a la relación con el árbitro. El martes ningún jugador dirigió la palabra al colegiado. Si lo hubieran hecho, habrían empleado las formas severas y cordiales de Vaca, educado y respetuoso. Sobre todo con la pelota.

"En los balones colgados jugamos con desventaja. Somos bastante pequeños"

"Tal vez les falte contundencia", analiza Azkargorta, ex seleccionador boliviano

"Somos un equipo que se caracteriza por poner la pelota en el piso", dice Vaca, satisfecho de su labor; "jugando por abajo, nos resulta más fácil todo. Si metemos un centro, lo hacemos para que el compañero lo reciba al pie, porque en los balones colgados jugamos con desventaja. Somos bastante pequeños".

Nacido en Santa Cruz de la Sierra, en la región más rica en futbolistas y en petróleo de Bolivia, Vaca posee el don de la lucidez. Tiene 24 años y los rasgos aguileños de los pueblos andinos. Su complexión ligera invita a los ojeadores europeos a la suspicacia. Él no lo entiende. "No creo que mi estatura me perjudique para nada", dice; "Messi es más pequeño que yo y no lo está haciendo nada mal en el fútbol europeo".

Contra Venezuela, bajo la atenta mirada de su presidente, Evo Morales; el anfitrión, Hugo Chávez, y Diego Maradona, el media punta sintió que estaba ante la noche de su vida. Después de siete años de peregrinaje entre el fútbol boliviano y la Major Soccer League estadounidense, en la que militó en los Dallas Burn y en los Metro Stars, la Copa América se le presentó como una ocasión perfecta para situarse en el escaparate. Su repertorio de regates, amagues y pases filtrados puso a la defensa de la selección organizadora en alerta permanente. Hasta el gol de Maldonado, Chávez contuvo la respiración.

Vaca, que ganó el campeonato boliviano con el Blooming en 2006, es la expresión de una manera de entender el fútbol. Este sentimiento compartido se refleja en el medio campo de su selección. "Nos hemos criado viendo jugar al Diablo Etcheverry y a Edwin Sánchez", asegura; "ahora, Edwin es el técnico y desde que llegó nos ha inculcado una forma de jugar. Siempre ha confiado en los mismos centrocampistas. Jugar con gente como Juan Carlos, Roland, Leonel y Gualberto se hace más sencillo porque todos saben con la pelota. Nos entendemos. Desde que Edwin agarró la selección, no hemos perdido ningún partido".

Javier Azkargorta, el técnico español que puso en el mapa futbolístico mundial a Etcheverry y Platini Sánchez, es, de alguna manera, uno de los padres espirituales del actual equipo. Ayer se mostró entusiasmado: "Juegan sin rifar la pelota. Bolivia fue fiel a su estilo. Tienen un gran manejo del balón y respetan la pelota. Tal vez les faltó contundencia en los últimos metros y un poco de fuerza en los balones divididos. Pero era un partido complicado porque Venezuela se ha volcado muchísimo en la Copa".

Resultados: Grupo A: Uruguay, 0; Perú, 3. Venezuela, 2; Bolivia, 2. Clasificación: 1. Perú, 3 puntos. 2. Venezuela y Bolivia, 1. 4. Uruguay, 0. Esta noche: Grupo C: Paraguay-Colombia (00.00, Canal + y Canal + Fútbol) y Argentina-Estados Unidos (02.45, Canal + Fútbol).