Portbou y Colera se unen contra el parque eólico Tramuntana
Portbou ha dicho no al futuro parque eólico Tramuntana, el proyecto estrella con el que CiU se presentó -y perdió- en las pasadas municipales. Además, el municipio fronterizo no se ha quedado solo, ya que cuenta con el apoyo de la vecina localidad de Colera, cuyo territorio también se ve afectado por la implantación de los molinos de viento.
Los alcaldes de Portbou y Colera (Alt Empordà), los socialistas Antoni Vega y Lluís Bosch, se han unido para hacer frente común contra la implantación del parque eólico Tramuntana. "Las cosas han cambiado", aseguró Vega, el nuevo edil socialista de Portbou que, con el apoyo de ERC, ha desalojado de la alcaldía al anterior equipo convergente. Socialistas y republicanos ya se habían unido durante la campaña electoral para expresar su oposición al proyecto eólico, que la federación nacionalista ha estado impulsando como alternativa económica a la crisis que vive Portbou desde el cierre de las aduanas y los puestos fronterizos.
Los dos alcaldes realizaron una declaración conjunta en contra de los molinos de viento durante la toma de posesión de sus respectivos ayuntamientos, celebrada el 16 de junio, y ahora han anunciado su intención de entrevistarse con el consejero de Economía y Finanzas de la Generalitat, Antoni Castells, para revisar el proyecto del parque eólico, que cuenta con todos los permisos a excepción de la licencia municipal.
El parque eólico Tramuntana, impulsado por la empresa Electravent SL, prevé la instalación de 17 aerogeneradores de 120 metros de altura con una potencia de 22 MW en una zona montañosa entre Colera y Portbou, en pleno corazón de las Alberas. El proyecto ha provocado una amplia fractura social en Portbou, donde se ha creado una plataforma cívica antimolinos que el pasado mes de abril interpuso un recurso extraordinario de revisión del parque. Otro colectivo contrario a los molinos es el de los ecologistas Salvem l'Empordà, que en 2004 llevaron el proyecto Tramuntana a los tribunales.
