El presidente de la Audiencia subraya la ayuda de Francia contra ETA

El presidente de la Audiencia Nacional, Carlos Dívar, sostiene en una entrevista: "Sin ayuda de Francia, en los últimos años no hubiéramos llegado a las metas que hemos alcanzado hoy en la lucha contra ETA".

El juez califica de "decisiva" la colaboración de ese país. En una entrevista concedida antes de recibir el próximo jueves, junto al juez antiterrorista francés Jean Louis Bruguière, el premio de la Asociación Diálogo a la Amistad Hispano-Francesa, Dívar reconoce, no obstante, que no siempre ha sido así y que en los años ochenta Francia era "un cierto santuario" para ETA.

"En la década de los ochenta todavía Francia no había entendido que los detenidos de ETA no eran presos políticos, y sentí la soledad. Estábamos solos frente a Francia y también en el mundo. Hubo algunas excepciones, como la primera entrega extradicional en 1984 o el envío de los papeles de Sokoa en 1986, pero esos supuestos fueron aislados: durante los años ochenta Francia fue un refugio, un cierto santuario para ETA. Eso nos hizo mucho daño y los jueces españoles nos sentíamos amenazados y solos. Ahora la colaboración es excelente. Sin ayuda de Francia, en los últimos años no hubiéramos llegado a las metas que hemos alcanzado hoy en la lucha contra ETA. Francia tiene conciencia de que los problemas de seguridad y terrorismo de España le afectan a ella, a Europa y en último término a la comunidad internacional", concluye el juez.

Dívar explica que en este momento hay 10 equipos de investigación conjunta hispano-franceses, de los que seis son antiterroristas. "Están dando un magnífico resultado", explica, "así como las euroórdenes, las entregas temporales y la cesión de jurisdicción. Se puede avanzar aún más en el reconocimiento mutuo de sentencias y en el acceso directo e inmediato, tan pronto como se produzca una detención o un principio de investigación, a la documentación de un país y otro".