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Entrevista:MARÍA JOSÉ BROSETA | Presidenta de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Valencia

"Valencia da mucha importancia a estar en el mundo y descuida el día a día"

Sara Velert

María José Broseta es desde agosto de 2005 la cara pública de miles de valencianos comprometidos con sus barrios. Veterana del movimiento ciudadano, esta mujer de "cuarenta y tantos" -no precisa más "por coquetería"-, preside la Federación de Asociaciones de Vecinos de Valencia, con 90 entidades, cuyas reivindicaciones lleva con su ejecutiva de concejalía en concejalía. No se cansa de pedir a los políticos que den participación al vecino de a pie en sus decisiones.

Pregunta. Afirma que los políticos deben bajar a la calle. ¿Qué verían?

Respuesta. La realidad que se vive en la calle es distinta a lo que se presenta sobre el papel. Si no bajan a la calle y se quedan en las estadísticas o meros planos, lo que ven es una realidad a medias. En las asociaciones se vive el día a día, se ve cómo un barrio sube o baja, se degrada o no, y sabes lo que realmente se necesita.

"Se hizo una inversión en Cheste, que según los pilotos, es uno de los mejores circuitos. Pues hay que amortizarlo. Lo otro no es necesario"
"Si los políticos no bajan a la calle y se quedan en las estadísticas o meros planos, lo que ven es una realidad a medias"

P. El programa de la Setmana Ciudadana se abrió con fotografías que reflejan deficiencias en calles y dotaciones. ¿Qué respuesta espera del Ayuntamiento?

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R. Nos hemos planteado hablar de una ciudad accesible a todos. No quedarnos en el punto de vista de las barreras arquitectónicas, sino hablar de accesibilidad a centros culturales, centros educativos que no sean barracones... y a la participación. En la federación nos creemos muy en serio la participación. Con las fotos haremos un dossier con la explicación de cada caso y lo enviaremos a Alcaldía y al concejal de Participación Ciudadana. Para que vean una pequeña muestra de servicios básicos necesarios. Pero también los ciudadanos debemos concienciarnos y no aparcar en doble fila, por ejemplo.

P. ¿Cuáles son los problemas principales a abordar?

R. En este momento tenemos un reto importantísimo, la revisión del plan general urbano. Tenemos que tener una visión de los próximos 20 o 25 años. Plantearnos qué queremos: ¿una ciudad que crezca con nuevos barrios y no tenga las dotaciones que sean necesarias?, ¿queremos una ciudad en la que la parte antigua también esté arreglada, con servicios y calidad? Otro ejemplo: hay barrios con cantidad de niños sin escuela, que se tienen que desplazar. O la educación de cero a tres años, otro problema gordo. Creemos que debe haber escuelas infantiles, no por un capricho, sino porque es una demanda ciudadana. Y parques, rutas peatonales, etc. Pero si las inversiones en los barrios son pequeñas porque se ha gastado el dinero en una serie de eventos que se consideran prioritarios... La Administración más cercana es el Ayuntamiento y es la que tiene menos ingresos. Debería tener más dinero para intervenciones en barrios, como centros de especialidades, que hay poquísimos. Tenemos que ganar en calidad de vida y eso supone mucha inversión.

P. Rita Barberá, apuesta por grandes eventos como la fórmula 1, que ha criticado la federación.

R. Nosotros no decimos fórmula 1 sí o fórmula 1 no. Pero sí creemos que eso afecta a la vida cotidiana de muchos vecinos. Hay una serie de inversiones por donde vaya a discurrir la fórmula 1 que suponen mucho dinero y la ciudad no está tan boyante. Dicen que con los espónsores el coste será cero. Eso es imposible, porque ya de entrada la calidad de vida de los ciudadanos se está infravalorando, no se cuenta con ellos. Si se hiciera se vería cómo les va a afectar. El otro día paseaba por unas calles que tienen un asfaltado horroroso, y con la milésima parte de lo que se van a gastar en el de la fórmula 1 se asfaltaría casi toda la ciudad.

P. ¿Las prioridades están equivocadas?

R. No lo sé, pero creo que se le da mucha importancia a que Valencia esté en el mundo. Nos embarcamos en esos proyectos y descuidamos un poco el día a día de los ciudadanos. Se hizo una inversión por parte de la Generalitat en Cheste, que según los pilotos es uno de los mejores circuitos. Pues hay que amortizarlo, poner buenas comunicaciones. Pero creo que lo otro no es necesario.

P. El PP ha ampliado su mayoría absoluta en las elecciones. ¿Afectará a su línea de trabajo?

R. Pues no. Si el Ayuntamiento, esté el partido que esté, nos da participación y hace caso de los criterios de los ciudadanos que están a pie de calle, estaremos de acuerdo. Si no, ya ha habido determinados temas que hemos llevado a los tribunales. Reivindicaremos todo aquello que consideren las asociaciones. Si se consiguen determinadas cosas, bien, si no seguiremos en nuestra línea. No somos correa de transmisión ni de unos ni de otros, de nadie.

P. El viejo Mestalla les enfrentó al PP y el nuevo también. ¿Qué alternativa proponen?

R. En ningún momento hemos dicho que no quisiéramos una zona deportiva de uso general en la avenida de las Cortes Valencianas. Incluso podría ser un estadio, con características distintas y municipal. Pero con este estadio [del Valencia CF] estamos perdiendo un suelo que vamos a permutar con una sociedad anónima deportiva a la que le interesa ahora tener ahí un campo, pero que si algún día decide ponerlo en otro sitio tiene derecho a hacerlo. El Ayuntamiento debe velar por el patrimonio de los valencianos, es su trabajo. Las permutas están previstas para el interés general de la Administración, no por el de una entidad privada. Además, se va a deteriorar la calidad de vida de los ciudadanos de esa zona. Las organizaciones internacionales deportivas aconsejan que los estadios se hagan en zonas alejadas del casco urbano.

P. ¿Qué opina de la nueva ordenanza contra el ruido?

R. Hay cosas que no nos gustan. No quiero adelantarme a las alegaciones, pero hay cosas como que los ciudadanos tengan que demostrar el ruido, o el blindaje a las fiestas. El problema hay que abordarlo muy seriamente, porque debido al buen clima y a que nos gusta salir ya no son sólo los establecimientos hosteleros los que provocan ruido. También lo causamos en nuestras casas, y está el tráfico. Son asuntos que no hay que dejar que se enquisten. Al ciudadano le afecta mucho y al final el único recurso que le queda es la justicia. Y mal haríamos si todo lo judicializamos. Hay que buscar soluciones antes.

P. Hay ayuntamientos que tienen presupuestos participativos, y la ley prevé un Consejo Social de la Ciudad. ¿Lo han pedido?

R. Hemos pedido ese consejo y otros más. Lo que no nos gusta es que sean vacíos de contenido. Si hacemos un consejo de participación y no va a ser vinculante en ninguna de las decisiones que se tomen, no lo queremos. En cuanto a los presupuestos, hay una parte de inversiones en las que debemos participar. El PP se comprometió a que les pasaremos en julio todas las peticiones, en muchos casos de hace años, de determinadas inversiones en los barrios para intentar colocarlas en los presupuestos de 2008.

P. La posibilidad de que repita en Valencia la Copa del América ha reabierto el debate sobre la ampliación del puerto.

R. Nosotros ya hicimos alegaciones, entre otras cosas, porque pensamos que una ampliación del puerto afectará a las playas y el medio ambiente. El que se haga o no tiene que ser por otros criterios que la Copa del América. El puerto está ahí, es una actividad económica que da trabajo, pero no consideramos que sea bueno que se amplíe. El caso es que ahora tenemos la Copa del América, la fórmula 1, las torres de Nouvel, el posible estadio del Levante, y el otro día se hablaba de la Esfera Armilar. ¡Al final, nos quedaremos sin agua! Es una vorágine de cosas que no se entiende. Ha habido un concurso de ideas y los que lo han ganado ahora deben pensar que su proyecto se les ha venido abajo. Es actuar de hoy para hoy. Hay que planificar las cosas.

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Sobre la firma

Sara Velert
Redactora de Internacional. Trabaja en EL PAÍS desde 1993, donde ha pasado también por la sección de Última Hora y ha cubierto en Valencia la información municipal, de medio ambiente y tribunales. Es licenciada en Geografía e Historia y Máster de Periodismo UAM-EL PAÍS, de cuya escuela ha sido profesora de redacción.

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