_
_
_
_
LA NUESTRA | SIGNOS
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Despierta: no es un sueño

Palabras mayores. Padezco de sueño intermitente. Me despierto y me vuelvo a dormir varias veces a lo largo de la noche. Pero nunca abro los ojos. Busco en la cama el pequeño transistor y, cuando no sigue encendido desde la anterior vigilia, vuelvo a conectarlo. El 15 de junio, con los ojos cerrados, reconocí la voz de Agustín Martínez en la desconexión provincial para Granada de la Cadena Ser a las ocho de la mañana. Jesús Quintero le dijo a Agustín -en Localia- que tiene una voz "muy bella"; yo diría que se le entiende extraordinariamente bien lo que dice y que eso hace espectacularmente alarmante lo que cuenta tras anunciar que va a informar de la realidad más cercana, que es nada menos que la de Granada y su provincia.

El 15 de junio fue inmisericorde, y eso que no llegó a decir que las declaraciones de Javier Arenas que reprodujo a las ocho y cinco eran un golpe bajo, una puñalada por la espalda, para el alcalde de Granada. Arenas dijo que Torres Hurtado es un hombre trabajador y honesto. Pero añadió: "Y culto". ¿Qué rencor atávico hay en esa excusatio non petita? A continuación, Sebastián Pérez, el presidente provincial del PP, dijo nada menos que los 270 votos que les habían faltado para ganar la Diputación eran votos comprados y subsidiados, de esas comarcas infectadas que hay. Lo oigo y pienso: despierta, abre los ojos, porque esto no es un sueño. Es la realidad más cercana a ti, la pesadilla de un dirigente político que genera espontáneamente (porque no creo que la haya estudiado) la doctrina de la dialéctica amigo-enemigo como clave de la política totalitaria de cualquier signo. Así ya puede uno echarse a la calle. También habló Torres Hurtado; pero no recuerdo lo que dijo, y eso es casi de agradecer.

Sigue el cortejo. Los informativos de La Nuestra no dejan de mostrarnos el lucido e interminable cortejo que sube a la Alhambra empeñado en hacer rico al señor que ha montado esta farsa de la que al parecer es imposible salirse. El miércoles subieron todos los delegados de la Junta en Granada y los miembros del Consejo Consultivo. Escuredo y De la Borbolla pusieron su más florido verbo al servicio de la causa. Por cierto: el Consejo Consultivo celebró allí una reunión en la que examinaron algunos papeles, entre ellos el nuevo proyecto de ley de la RTVA, en el que al parecer se incluye la elección parlamentaria del director general de la misma por mayoría de tres quintos. Veremos si no vuelve a encallar en el Parlamento autonómico.

Pero el cortejo que sube a nuestra maravilla puede verse incrementado de una manera gigantesca: la Consejera de Cultura ya ha dejado caer que la Alhambra admite seiscientos mil visitantes más al año. ¿Está esa propuesta avalada por los estudios pertinentes? ¿Qué dice al respecto el Plan Director del monumento recién presentado? Informen de este asunto y dejen de dar el tostón con el cortejo de marras.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_