Van Nistelrooy sorprende a Van Nistelrooy

El primero en sorprenderse por la excelente temporada de Ruud van Nistelrooy es él mismo. En su primer año en la Liga, se ha distinguido como pichichi con 25 goles, a sólo uno de la bota de oro, conseguida por Totti como máximo realizador europeo, y logró marcar en siete jornadas seguidas. Lesionado en la primera parte, no pudo ampliar anoche su racha. "No me esperaba hacer una campaña así en un club nuevo, en una ciudad nueva. Para mí, significaba empezar todo desde cero", comentaba la víspera del partido contra el Zaragoza, hace más de una semana. Y empezar desde cero con 25 años no es lo mismo que hacerlo con 30.

Para la dirección deportiva del Madrid, su edad no ha sido un problema. Ni lo fue a la hora de plantear su fichaje el pasado verano. "Ha cumplido con nuestras expectativas. Sabíamos que se adaptaría rápidamente al fútbol español por su gran profesionalidad", dicen. Es lo mismo que destacan Emilio Butragueño y Santillana, dos de los máximos goleadores del Madrid. El Buitre está asombrado por los numerosos recursos del holandés -tienen sentido del desmarque, es buen cabeceador, sabe colocarse y girarse muy bien dentro del área engañando a los defensas cuando menos se lo esperan- y lo califica de "completo" mientras que Santillana dice que es "una especie en extinción".

"Es un goleador de los clásicos, de los que ya no quedan", dice de él Santillana

Van Nistelrooy, crecido en la granja de su abuelo y criado entre ovejas y vacas, aseguró que lo que le atrajo a Chamartín fue el club y su tradición. Lo que desconoce es que la dirección deportiva del Madrid vio en él "una garantía de seguridad" que iba más allá de su madurez deportiva.

Corría junio cuando Pedja Mijatovic y Franco Baldini se reunieron con Fabio Capello -Ramón Calderón era todavía uno de los cinco candidatos a la presidencia- para dibujar el plan de fichajes para la campaña 2006-07. El conjunto blanco necesitaba a un delantero centro clásico que acompañara a Ronaldo. "La decisión de traerlo fue de Pedja. Había dos alternativas: o gastar una pasta para comprar a Drogba o gastar un poco menos y apostar por la seguridad. Van Nistelrooy se ajustaba a ese perfil por profesionalidad y regularidad", comentan fuentes de la entidad blanca.

En ningún momento se preocuparon por la edad del holandés, que cumplirá 31 años en julio. "La base del equipo estaba más o menos hecha. Necesitábamos a un par de jugadores con experiencia. Sabíamos que Ruud se adaptaría rápidamente: ha hecho grupo en todos los clubes en los que ha jugado. Siempre ha sido un hombre de vestuario", añaden.

Lo mismo opina Santillana, quien se confiesa un enamorado del delantero holandés. "No creo que se haya adaptado tan rápidamente a nuestro fútbol por que los centrales de la Liga sean inferiores a los de la Premier. Van Nistelrooy es un jugador que, por sus características, se defendería bien en cualquier tipo de fútbol. Acabaría marcando en cualquier Liga", analiza. Y explica en qué se diferencia de los demás. "Es un goleador de la vieja usanza, de los clásicos. Es una especie en extinción, de las que ya no quedan en este fútbol en el que parece que sólo hay mediapuntas", enfatiza. "Tiene una gran fortaleza física, pero, al tiempo, una zancada veloz. Es buen cabeceador, sabe rematar con la izquierda y con la derecha. Son características que no tiene casi nadie ya", matiza; "creo que en España sólo hay un delantero que se le parezca un poco: Villa".

"Soy un goleador de área, no el típico delantero holandés que sabe moverse bien en el centro del campo", se definía Van Nistelrooy a principio de temporada, sabedor del pasado que traía consigo. En sus cinco temporadas en el Manchester United marcó 200 goles, pero ninguno desde fuera del área.

En el Madrid ha conseguido uno. Fue el que abrió el marcador en el Camp Nou (3-3), frente al Barça, a los cinco minutos, después de aprovechar en el balcón del área un mal despeje de Thuram tras una jugada por la izquierda.

"Ése no es ningún problema. No se le va a discutir por no marcar mucho desde fuera del área. Tiene 30 años y, a su edad, ya no se puede mejorar mucho", abunda Santillana, quien evita dar consejos al holandés. "Lo único importante es saber administrar las energías y Ruud lo sabe hacer muy bien porque evita bajar al centro del campo para buscar la pelota. Él es letal en los últimos 20 o 25 metros. Allí es donde tiene que estar y lo ha entendido perfectamente", subraya.

El rendimiento del ariete holandés esta temporada tampoco ha sorprendido a Butragueño. "Es un ganador, uno que ha hecho de su regularidad la característica que mejor lo define", afirma. "Es un luchador y lo demuestra un hecho importante: durante gran parte de la campaña, al equipo le ha costado no sólo conseguir buenos resultados, sino también jugar al fútbol, pero él ha tirado del carro y ha seguido marcando goles como si nada. Y, además, en los últimos tres meses, su rendimiento ha sido decisivo para ganar la Liga".

Butragueño no quiere hacer comparaciones, pero Santillana sí cree que tiene algo en común con Van Nistelrooy. "Le pasa lo que me solía pasar a mí. Como depende del juego del equipo, rinde más cuando el juego es más alegre, fluido, compacto y utiliza mucho las bandas. Por eso en los últimos meses se ha salido", concluye.