"Prefiero un Gobierno de centro-izquierda en Navarra"

Pronto cumplirá ocho años al cuidado del PSOE. José Blanco (Palas de Rei, Lugo, 1962) anda estos días enfrascado en el runrún de los pactos que permitirá desde hoy a los socialistas ampliar su poder municipal. Eso le permite sonreír tras unas elecciones en las que el PP recuperó el honor de ser el partido más votado. Tiene Blanco un mapa particular donde pinta de colores los avances del PSOE.

De su futuro apenas habla, como si no le preocupara. "Mis preferencias no importan porque las decisiones le corresponden al presidente del Gobierno, pero ahora es el momento de trabajar...". Asegura por dos veces que no le hace ilusión ser ministro y añade: "En todo caso tengo más miradas que la de ser secretario de Organización o ser ministro de España". ¿En la iniciativa privada?, pregunta EL PAÍS.

"Si acordamos con Nafarroa Bai, ese Gobierno nunca tendrá como objetivo la independencia o la anexión"

"Los que hagan un Ejecutivo en Canarias contra la voluntad de cambio lo pagarán caro"

"Rajoy y Acebes son cualquier cosa menos una expectativa estimulante de futuro"

"Estamos en disposición de ampliar la mayoría conseguida en las pasadas elecciones generales"

- Se acabó ahí, contesta sin dar más opciones.

Pregunta. Después de lo ocurrido el 27-M ¿Puede hacer un pronóstico para las elecciones generales?

Respuesta. Las elecciones generales no se ganan tan solo teniendo un buen resultado en una o dos comunidades autónomas. Ese es el espejismo del PP. Para ganar hay que tener una presencia relevante en las 52 circunscripciones. No se puede ganar España siendo residual en Cataluña y en el País Vasco, retrocediendo en Galicia, en Andalucía y en Canarias. Sólo puede ganar en España un partido que sea capaz de vertebrarla, con una representación homogéneamente distribuida en todo el territorio. Estas elecciones pusieron de manifiesto que el PSOE sigue siendo el partido que más se parece a España porque tenemos una presencia decisiva en todo el territorio español. La gente vota por futuro y hoy el PSOE y Zapatero siguen representando mejor la modernidad, el cambio, los nuevos tiempos, que el PP. Rajoy y Acebes son cualquier cosa menos una expectativa estimulante de futuro y por eso estoy seguro de que vamos a ganar esas elecciones generales.

P. ¿Por más o por menos que las últimas?

R. Estamos en condiciones de ganar y creo que estamos en disposición de ampliar la mayoría conseguida en las pasadas elecciones generales.

P. ¿Sólo tienen un problema electoral en Madrid?

R. Hemos ampliado nuestro poder municipal. El PP está muy contento por el resultado de las elecciones. Yo si estuviera en su lugar estaría preocupado. Porque si haber perdido el gobierno de un tercio de las capitales de provincia, haber perdido unas pocas diputaciones y haber perdido el Gobierno de alguna comunidad autónoma les llena de satisfacción, allá ellos. La realidad es que el PSOE va a gobernar a más ciudadanos y tiene más poder institucional. Nosotros hemos tenido un problema en Madrid porque nuestras expectativas no se han visto colmadas en cuanto al resultado. Yo no voy a buscar culpables. Si hay una culpa, esta es colectiva. Los candidatos cumplieron con su obligación con toda dignidad en la campaña electoral y en la forma de aceptar la derrota y no tenemos nada que reprocharles.

P. Rajoy plantea una reforma legal para impedir que candidatos con menos del 30% de los votos puedan ser alcaldes o presidentes regionales. ¿Qué opina?

R. Siempre se puede hacer una reflexión sobre nuestro sistema electoral, pero lo que no se puede hacer es en función de la coyuntura, de si a uno le va mejor o peor en el resultado, y a partir de ahí tratar de hacer un planteamiento que le resulte más favorable. Si el PP quiere abordar en serio el tema de las reformas electorales, siempre se puede hablar. Pero hay que respetar el sistema actual. Si se configura una mayoría de concejales para elegir un alcalde es legítimo, e igual si se hace para la presidencia de un Gobierno autónomo.

P. Luego usted entiende que el próximo presidente canario no sea el socialista Juan Fernando López Aguilar, que fue el más votado, sino Paulino Rivero, de Coalición Canaria, con los votos del PP.

R. Podría llegar a entenderlo aunque nunca lo podría compartir porque en este caso el resultado es inapelable y responde a una pulsión de cambio muy evidente en Canarias. Una fuerza política que era la tercera, nosotros, hemos sido ampliamente respaldados en el conjunto de las islas. Si se hace un Gobierno contra la voluntad de cambio, quien lo haga lo pagará caro en las urnas.

P. ¿Habrá pactos con Nafarroa Bai en ayuntamientos navarros?

R. No tenemos excluido a Nafarroa Bai de la posibilidad de gobierno. Es un partido democrático, en cuyo seno entre otras fuerzas está el PNV. No veo por qué el PNV, que está dentro de Nafarroa Bai, no puede gobernar con nosotros en Navarra y el PP le esté ofreciendo la alcaldía de Sestao, no sé dónde está la diferencia. No podemos, honestamente, estar todos los días diciéndole a la sociedad que hay que integrar, conseguir que el mundo de la izquierda abertzale renuncie a la violencia, participe en las instituciones democráticas, y cuando alguien da ese paso, demonizarlo. El PSOE no lo va a hacer. Si tenemos acuerdos programáticos, no excluimos a Nafarroa Bai de la gobernabilidad de diferentes instituciones navarras. Deseo que el próximo presidente de Navarra sea Fernando Puras, voy a trabajar para que así sea. Y además creo que debe ser con un acuerdo lo más amplio posible, sin exclusiones a priori y siempre desde el respeto a las reglas de juego. No vamos a compartir Gobierno con aquellos que nos hagan planteamientos que supongan modificar el actual estatus de Navarra.

P. ¿Prefiere en Navarra un Gobierno de centro-izquierda o con la derecha de UPN?

R. Por preferir, siempre prefiero Gobiernos de centro-izquierda, porque son los que garantizan compromisos sociales, igualdad, derechos de la gente, que no garantiza la derecha. Pero le diré que en Navarra hay circunstancias que aconsejan la mayor integración y la suma de todos. Por eso, me parece muy importante que lo que representa UPN esté presente también en ese futuro Gobierno. Para poder configurar un Gobierno con Nafarroa Bai tenemos que tener las cosas claras en el terreno donde tenemos discrepancias, que es en el terreno de la identidad. Y para configurar un Gobierno con UPN tendremos que tener las cosas claras en el terreno de las políticas sociales, de las politicas de derechos, que es donde tenemos una gran distancia entre ellos.

P. ¿Un pacto con NaBai les perjudicará en el resto de España?

R. Tomaremos nuestras decisiones pensando en lo mejor para Navarra, no en un puñado de votos, eso es lo que hace el PP y eso explica muchas de las decisiones que adopta, anteponiendo el interés de su partido al interés general.

P. ¿Perjudicará la unidad democrática contra ETA la decisión que adopten en Navarra?

R. En Navarra hay fuerzas democráticas que rechazan la violencia, que no tienen complicidad con ese mundo, son fuerzas respetables y honorables con las que se puede compartir un proyecto político.

P. Pero defienden la independencia y la anexión a Euskadi...

R. Si algún día alcanzamos un acuerdo con Nafarroa Bai, el Gobierno que formemos no tendrá como objetivos la independencia o la anexión, nunca. Por tanto, una condición es que olviden esos proyectos, que son suyos, pero que jamás serán nuestros, ni de un proyecto que pudiéramos compartir. No vamos a aceptar nunca un chantaje de nadie. Tampoco del PP. ¿En qué afecta a la lucha contra el terrorismo el que nosotros gobernemos en Navarra con tal o cual formación política? La unidad es necesaria, también la cooperación del PP. ¿Pero qué tiene que ver esto con el Gobierno de Navarra? Que yo sepa, ninguna de las fuerzas que componen el Parlamento de Navarra apoyan o comprenden la actuación de ETA, ninguna. No se pueden mezclar churras con merinas.

P. Rajoy insiste en que la presencia de ANV en los ayuntamientos es una prueba de fuego para el consenso antiterrorista...

R. Rajoy no condicionó su apoyo a ese hecho, porque sabe que con la ley en la mano y la jurisprudencia del Supremo, es imposible que los electos de ANV no tomaran posesión. Los electos de ANV deben saber que si hay una vulneración de ley, el Gobierno instaría la ilegalización, pero siempre respetando las previsiones de la ley.

P. ¿Si ANV repite el comportamiento de Batasuna en 2002, que se negó a condenar un atentado y el Gobierno instó su ilegalización, ustedes actuarán igual que Aznar?

R. No voy a especular sobre futuribles. Lo que digo es que cuando haya un incumplimiento claro de la ley, el Gobierno instará la ilegalización.

P. ANV no condenó la violencia terrorista cuando ETA anunció la vuelta a las armas y ha dado pruebas suficientes de que es una extensión de Batasuna. ¿No lo tiene usted claro a estas alturas?

R. ANV es un partido legalizado hace 30 años. Durante el mandato de Aznar se les restituyó el patrimonio en compensación por lo incautado durante el franquismo. Entiendo que cuando el Gobierno de Aznar tomó esa decisión...

P. Pero entonces no tenía actividad, y ahora la tiene...

R. Tomó una decisión en relación con un partido legalizado y entiendo que sería conforme a derecho. Reitero que si de acuerdo con la ley, en ANV hubiera indicios que vulneran la Ley de Partidos, se procedería. Y le recuerdo que dos decisiones del Tribunal Supremo y el Tribunal Constitucional tomadas hace tres semanas ratifican la posición que estoy apuntando.