El Bloque reclama a los socialistas áreas blindadas en el gobierno local de Ourense

El BNG no está dispuesto a compartir competencias con el PSOE en el gobierno municipal de Ourense. Los nacionalistas reclaman al candidato socialista, Francisco Rodríguez, áreas blindadas y diferenciadas de las que gestionen los socialistas, de forma que se produzca un reparto del gobierno en dos mitades iguales. El candidato a la alcaldía, Francisco Rodríguez, se reunirá hoy por la mañana con el cabeza de lista del Bloque, Alex Sánchez Vidal, para "intentar cerrar un reparto" de competencias que permitan un acuerdo firme. "Cederemos las dos partes", afirmó Rodríguez.

El candidato del partido socialista a la alcaldía de Ourense, Francisco Rodríguez, será regidor este sábado gracias al apoyo ya anunciado de los seis ediles del BNG y de los ocho de su propio grupo, pero carece aún de garantías para poder gobernar. Los nacionalistas están dispuestos a no respaldarlo en el pleno del próximo mes en el que deberá aprobar dedicaciones exclusivas y crear comisiones municipales, para lo que necesita mayoría absoluta, si no obtienen antes en las negociaciones un acuerdo que dé satisfacción a sus demandas.

Superada la crispación de la primera semana, abierta como consecuencia de las "filtraciones interesadas" de ambas partes, y retomado el martes el proceso negociador, el Bloque acudió a la reunión de ayer con una postura firme. "No formaremos un gobierno de coalición, sino un bigobierno", señalan fuentes de la organización, destacando que reclamarán el 50% de las áreas de poder. "Queremos un reparto porcentual de todas las áreas, tanto de las buenas como de las malas", advierten.

El BNG está dispuesto a aceptar que el PSdeG se quede con las dos grandes parcelas que este partido reclamó desde el comienzo: Urbanismo y Bienestar Social. También acepta que los socialistas que las dividan en las concejalías que consideren oportunas, pero en la organización nacionalista han realizado una equivalencia según la cual las competencias de Urbanismo son iguales a la suma de Economía e Infraestructuras, mientras que Bienestar Social equivale a Turismo, Comercio y Empleo.

Plus de alcaldía

Ante un posible rechazo del PSdeG a su propuesta, los representantes del BNG advierten: "Ya le hemos dado el plus de la alcaldía, con gran generosidad por nuestra parte". Para el resto de las áreas, las de gestión -Sanidad, Personal o Policía-, el Bloque propone un reparto paritario y equitativo entre ambas fuerzas políticas.

De esta forma, los nacionalistas rechazan la propuesta del partido socialista de cogestionar parcelas. "Nada de eso; queremos concejalías blindadas, en las que no entren los socialistas y nos conformamos con menos departamentos, pero que sean exclusivamente nuestros", manifiestan las fuentes del BNG, dejando claro su rechazo a un gobierno de coalición.

La propuesta del Bloque Nacionalista Galego ha sido acogida con escepticismo por los socialistas. Francisco Rodríguez destaca que "sólo puede tildarse de chantaje" una proposición presentada como innegociable, toda vez que se pone como condición para la formación de gobierno. "Pues tendrán que gobernar ellos, o tendrán que dejar que gobierne el Partido Popular", señala el socialista, para anunciar a continuación: "Desde luego, yo no acepto chantajes".

En cualquier caso, Francisco Rodríguez confía en el papel de las comisiones negociadoras y en que el BNG orensano tendrá que "aceptar el acuerdo marco, firmado por su propia organización, en donde quedó claro que se formarían coaliciones, no bipartitos".

Bastante lejos de la pretensión de los nacionalistas, el candidato del PSdeG insiste todavía en la necesidad de llegar a acuerdos a través del debate sobre los programas "por encima del reparto de parcelas de poder". Y señala al respecto: "Yo creo que al final acabará imperando el sentido común y que se disipará el intento de chantaje".

Con esta posición de fuerza por parte del BNG, se sentaron ayer de nuevo a negociar las comisiones delegadas de las dos formaciones. "Ahora se trabaja en base a nuestra propuesta y ya pasó a la historia la que nos propuso inicialmente el PSdeG, muy poco meditada, en donde se nos ofrecían los restos", señalan los portavoces del Bloque.

En su comparecencia posterior ante los medios de comunicación para dar cuenta del contenido de la reunión, los delegados de las dos organizaciones fueron cautos y dibujaron un panorama de entendimiento. Destacaron los "avances importantes en lo programático, salvo algunos flecos" y, aunque en menor medida, también en el reparto de responsabilidades. "La investidura está garantizada", manifestaron. Los negociadores no quisieron comprometer una fecha para el acuerdo definitivo. "Lo que hagamos nosotros deberá ser después refrendado, o quizás matizado, por los dos líderes", dijeron.