Los últimos Presupuestos de Solbes arrancan con menos apoyos

El Gobierno tendrá este año más dificultades para sacar adelante los Presupuestos de 2008, los últimos de la legislatura. El techo de gasto de esas cuentas, clave para elaborarlas, ha superado el primer trámite parlamentario, pero con menos apoyos de los que obtuvo el Presupuesto de 2007. Sólo el PNV y CC respaldaron el proyecto. La reforma fiscal aplicada este año moderará los ingresos previstos para 2008, que avanzarán un 7%.

Con la vista puesta en las elecciones generales, los grupos políticos optan por distanciarse del Gobierno y transmitirle el mensaje de que los apoyos este año cotizan al alza. Al menos de momento: las negociaciones no han hecho más que empezar y lo que ayer fueron abstenciones pueden transformarse en votos a favor (o viceversa). Los grupos con los que más iniciativas ha pactado el Ejecutivo desde el principio de la legislatura (IU, ERC y CiU) se abstuvieron, y sólo el PP votó en contra. Los apoyos de PNV, BNG y Coalición Canaria permitieron aprobar el techo de gasto.

La primera piedra para los Presupuestos de 2008 fija un crecimiento del 6,7% en el límite de gasto, en consonancia con el avance de la economía (sin descontar el efecto de la inflación). Ese crecimiento eleva el gasto a 152.560 millones de euros.

Economía tendrá que esmerarse por conseguir el acuerdo necesario. Los Presupuestos de 2007 salieron adelante con el respaldo de todos los grupos, salvo el PP y EA. Ayer, el propio PNV, que apoyó el proyecto, advirtió de que eso "no supone un voto favorable a los Presupuestos" del año próximo, según el diputado Pedro Azpiazu.

Puerta abierta

El PP votó en contra porque el gasto previsto es "expansivo" y puede recalentar la economía. Los abstencionistas dejaron la puerta abierta a la negociación, aunque vertieron algunas críticas. Desde Izquierda Verde, Joan Herrera subrayó la "obsesión" por el superávit. Las cuentas de 2008 contemplan una diferencia entre ingresos y gastos equivalente al 1,15% del producto interior bruto (PIB). "Será posible mantener unas cuentas públicas saneadas y reducir la deuda del Estado", explicó el vicepresidente y ministro de Economía, Pedro Solbes, en el pleno del Congreso.

Uno de los principales elementos en las cuentas de 2008 será la moderación que se espera en el volumen de ingresos. En los últimos ejercicios, la bonanza económica se ha traducido en un crecimiento de dos dígitos en los ingresos del Estado, pero el panorama cambiará en 2008. Solbes apuntó que se prevé un avance del 7%, inferior al 11,5% registrado en el primer trimestre de este año. La reforma fiscal, que ha rebajado el IRPF y el impuesto de sociedades, y la desaceleración que se espera en la demanda interna suavizará el crecimiento de los ingresos.

Solbes avanzó también que los Presupuestos de 2008 incorporarán, como los anteriores, la llamada deflactación de la tarifa del IRPF, es decir, la adaptación de los tramos del impuesto al crecimiento de la inflación (previsiblemente el objetivo oficial, un 2%). Esto implica que el ciudadano paga menos que en si los tramos permaneciesen intactos.