Ugo Amaldi asegura que Europa seguirá "atentamente" el centro de Física Médica

El físico italiano Ugo Amaldi aseguró ayer que Europa "va a seguir atentamente cómo se desarrolla" el Instituto de Física Médica de Valencia, una de las 23 grandes infraestructuras científicas pactadas entre el Gobierno y las comunidades autónomas, que costará 120 millones de euros. El experto en aceleradores de partículas y en su aplicación médica participó en un congreso de la Universitat de València, donde destacó que la triple función del instituto, que tratará pacientes oncológicos, investigará y transferirá tecnología al sector privado lo convierten en un caso "especial".

El Instituto de Física Médica de Valencia (Ifimed), promovido por la Universitat de València y el Consejo Superior de Investigaciones, cuya financiación correrá a cargo del Gobierno y la Generalitat, contará con un ciclotrón de protones de alta energía, según confirmó ayer el coordinador del proyecto José Bernabéu. Un tipo de acelerador de partículas que permitirá atender entre 1.500 y 3.000 pacientes de cáncer al año y a un 10% del total de tumores que pueden tratarse con radioterapia. La energía producida por el acelerador permitirá alcanzar tumores que se encuentren a una profundidad de hasta 32 centímetros -prácticamente todos-. El instituto debería estar funcionando, como máximo, en cinco años.

El Ifimed abrió ayer un congreso sobre grandes instalaciones científicas de aceleradores con aplicaciones médicas a las que acudieron algunos de los grandes expertos en la materia. El encuentro tenía entre sus objetivos someter a su análisis el proyecto valenciano e incorporar algunas de sus sugerencias al proyecto técnico, que se encuentra prácticamente terminado.

Amaldi, un prestigioso físico italiano que entre otros centros ha trabajado en Laboratorio Europeo de Física de Partículas (CERN) de Ginebra, calculó ayer que el instituto valenciano tardará entre cinco 10 años en empezar a explotar su vertiente comercial desde el momento en que sea inaugurado.

"Pero antes de que eso ocurra, el centro habrá producido ya gente bien preparada, porque tendrá personal trabajando en un campo fronterizo, desarrollando tecnología y formando buenos estudiantes. Según mi experiencia todo eso puede ser más importante en muchas ocasiones para la sociedad que un producto concreto, una invención o un nuevo desarrollo".

El instituto será el primero de esas características en España. El físico italiano afirmó que harán falta al menos tres más. "En Europa se estima que en los próximos 10 años debería haber un centro por cada 10 millones de habitantes". En todo el mundo existen unos 30, la mayor potencia, Japón, casi ha alcanzado ya esa media.