Fallece un niño en una piscina de Calaf al intentar coger una pelota

Un niño falleció ahogado el sábado pasado por la noche en la piscina municipal de Calaf (Anoia). La instalación estaba cerrada -no abre hasta el verano-y el menor habría saltado la valla para acceder al interior del recinto y coger una pelota que se le había caído.

El acceso a la piscina de Calaf es fácilmente vulnerable y, según admitió ayer la misma alcaldesa en funciones de la población, Antònia Trullàs, es habitual que niños que juegan a futbol en los terrenos colindantes a la piscina entre en el recinto a recoger los balones.

En este caso, la pelota habría caído en el interior de la piscina, donde el menor murió ahogado sin que nadie le pudiese rescatar. Trullàs hacía ayer un llamamiento a los jóvenes a no acceder al recinto cuando esté cerrado ya que no está vigilado.

Los hechos sucedieron en las piscinas municipales de Calaf después de las 20.30 horas del sábado. El niño fallecido era vecino de Calaf y las primeras investigaciones apuntan a que se ahogó al caer a la piscina cuando intentaba coger la pelota que flotaba en el agua. Pese a que dos dotaciones de bomberos llegaron con rapidez e intentaron reanimar al niño, éste había fallecido ya cuando recibió la atención.