La negociación de los pactos entra en su semana crucial

La negociación de los pactos postelectorales para gobernar las instituciones está a punto de entrar en su semana crucial. La constitución de los ayuntamientos, fijada para el próximo 16, marca el horizonte temporal en el que habrán de concretarse los pactos en aquellos municipios en los que ninguna fuerza obtuvo la mayoría absoluta.

En el caso de las diputaciones los partidos disponen de más tiempo, ya que los plazos se empezarán a contar a partir de la celebración del pleno de incompatibilidades, cuya fecha se decide una vez constituidas las Juntas Generales por inscripción de, al menos, un tercio de sus miembros.

Los primeros en ponerse manos a la obra fueron el presidente del PP alavés y alcalde de Vitoria en funciones, Alfonso Alonso, y el secretario general del PSE en ese mismo territorio, Juan Carlos Prieto. El pasado viernes se reunieron para hablar de la constitución de los ayuntamientos y la Diputación de Álava.

Sin embargo, el PSE cree que, al tener que jugar en la negociación con dos instituciones distintas, puede darse el caso de que falte tiempo para cerrar un acuerdo en algunos ayuntamientos, lo que convertiría en alcaldes a los cabezas de las listas más votadas y después llegaría la búsqueda de apoyos estables.

Los populares piensan que el choque por la Diputación alavesa no se va a trasladar al resto de los municipios, especialmente a los de la Rioja Alavesa. Así, creen que podrán gobernar en Baños de Ebro pese a perder la mayoría absoluta, ya que los socialistas no mantendrán la alcaldía del vecino Elciego sin el apoyo del PP. Ambos partidos también se complementan en Moreda de Álava, donde el PP puede romper el desempate con el PNV, y en Lanciego donde el concejal socialista daría la alcaldía a los populares.

EB-Aralar no descartó formar gobiernos de izquierda en las instituciones, aunque tampoco cerró la puerta a un tripartito con PNV y EA, la fórmula que también va a explorar el PSE. Este partido ha rechazado pactos globales.

El PP, mientras tanto, no cree que su postura de enfrentamiento con todos le vaya a aislar políticamente y no renuncia a la alcaldía de Getxo, donde su partido está empatado a 10 concejales con el PNV y depende de la decisión del PSE. Los socialistas dependen a su vez del PP en Sestao. Pero el PNV también está tanteando a los populares para ver qué va a suceder en Plentzia, donde los nacionalistas tienen la lista más votada pero no disponen de la mayoría suficiente para gobernar con tranquilidad.