Brufau refuerza la cúpula de Repsol con un 'número dos' y un director de YPF
La petrolera crea una nueva unidad de negocio de gas con Enrique Locutura al frente
El presidente de Repsol YPF, Antonio Brufau, presentó ayer al Consejo de Administración de la petrolera una reorganización de la cúpula directiva del grupo. Según fuentes próximas al consejo, Brufau ha decidido nombrar a Miguel Martínez como director general de operaciones. Del nuevo número dos dependerán las cuatro direcciones generales de negocio. Desaparece la unidad ABB (Argentina, Brasil y Bolivia), a cuyo frente estaba Enrique Locutura. En su lugar, se nombra como director general de YPF a Antonio Gomis. Locutura asume el negocio de gas natural licuado (GNL).
El Consejo de Administración de Repsol YPF aprobó ayer por la tarde la nueva organización directiva del grupo. Brufau expuso la necesidad de acometer esta reestructuración de la cúpula para acometer los retos estratégicos de la compañía.
La remodelación es la segunda de gran calado que acomete Brufau desde que está al frente de Repsol. En la anterior, asumió todo el poder ejecutivo de forma directa con la supresión de la figura del consejero delegado. Ahora, pone al frente de los negocios a un número dos que lleve el día a día de las operaciones para poder dedicar más tiempo a las cuestiones estratégicas.
Miguel Martínez, hasta ahora encargado de control de gestión y desarrollo corporativo se convierte así en nuevo director general de operaciones. Tendrá competencias sobre la coordinación y control de los negocios, la obtención de sinergias y la mejora de la eficiencia. Martínez, que empezó su carrera en Arthur Andersen como el propio Brufau, entró en Repsol hace casi 15 años. Es un hombre de la casa.
También lo es la otra figura emergente de la reestructuración de ayer. Se trata de Antonio Gomis, hasta ahora al frente del negocio químico del grupo y que ya contó con la confianza del anterior presidente, Alfonso Cortina.
Gomis ha sido la persona elegida por Brufau para ponerse al frente de YPF en un momento decisivo para la filial argentina. YPF afronta en los próximos meses la entrada de socios locales estables y la colocación en Bolsa de parte del capital, una operación con la que la petrolera pretende captar recursos, reforzar su implicación local y poner en valor el negocio en Argentina.
Para la coordinación con los nuevos socios y para las siempre complejas relaciones con el Gobierno y las autoridades locales, Brufau ha preferido contar con el perfil más institucional de Gomis frente al de Locutura, un hombre de carácter técnico. Además, Repsol singulariza como unidad de negocio a Argentina, en lugar de tenerla integrada como hasta ahora con la actividad de Bolivia y Brasil.
Desaparece ABB
La unidad ABB, por tanto, desaparece. El negocio de Argentina queda en YPF y el de Bolivia y Brasil pasa a estar integrado en las unidades de negocio de exploración y producción (upstream) o en la de refino, comercialización, química y gases licuados de petróleo (downstream), que mantienen a sus directores generales.
Locutura, que estaba al frente de ABB, se pone ahora al mando de una nueva unidad de negocio de gas natural licuado (GNL), en la que la petrolera hispano argentina es líder mundial y tiene grandes perspectivas de desarrollo. Repsol tiene en ese campo una alianza con Gas Natural, compañía de la que Locutura fue consejero delegado, lo que puede facilitar los lazos entre ambas.
Junto al número dos, dependerán directamente de Brufau los cuatro directores generales corporativos. Entre ellos también hay una cara nueva: Javier Macián se hará cargo de la dirección general de recursos humanos en lugar de Jesús Fernández de la Vega, por prejubilación de éste.
En paralelo, estarán bajo el mando directo de Brufau dos direcciones corporativas cuyos titulares no pertenecerán al comité de dirección de la petrolera. Se trata de Miguel Ángel Devesa, que asume las tareas de estrategia y desarrollo corporativo que antes desempeñaba Martínez, y de Patricia Mantel, al frente de la nueva dirección de Desarrollo Directivo, con el fin de identificar, retener y promocionar el talento dentro de la compañía, según explicó Brufau al consejo.
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