Las plataformas vecinales insisten en su rechazo al nuevo Mestalla, Patraix y el plan de El Cabanyal

Las plataformas vecinales y otros movimientos cívicos que se han enfrentado al PP en pasados mandatos no cejarán en sus reivindicaciones y se preparan para nuevos desencuentros en tiempos difíciles. Así lo anuncian varias asociaciones en Valencia. "Ahora son más fuertes y tienen menos oposición, pero nosotros seguiremos con nuestras movilizaciones", anuncia Ana Puchalt, portavoz de la plataforma de Benicalap, Campanar y Beniferri que reúne el rechazo vecinal al nuevo estadio del Valencia CF en la avenida de las Cortes Valencianas. El PP ha ganado a la izquierda en los barrios afectados por el nuevo campo, a pesar del ligero avance socialista, igual que ha ocurrido en Patraix. Para los afectados por la subestación eléctrica "la situación sigue igual", afirma uno de sus portavoces, Tomás Frutos. "Nuestra lucha no tiene carácter político, es por nuestra salud, por lo que seguiremos exigiendo el traslado", subraya. Los vecinos recordarán a Barberá que ha prometido dejar la subestación cerrada mientras no se garantice la seguridad. "Si antes con menos concejales hacían lo que les parecía, ahora con mayor motivo. Poco van a contar las iniciativas ciudadanas", augura María Dolores Canet, representante de los ciudadanos que exigen otro traslado, el de la clínica Virgen del Consuelo, pendiente de una sentencia por las molestias que genera.

Nueve años "de acoso muy fuerte" lleva a las espaldas El Cabanyal, donde el PP ha cosechado el fruto de la degradación del barrio, apunta Faustino Villora. Salvem El Cabanyal-Canyamelar confía en una sentencia favorable en contra de la prolongación de Blasco Ibáñez por el barrio, en el que la izquierda retrocede -Els Poblats Marítims registró una mayor abstención que la media-.

La victoria del PP tampoco modificará la postura de la Asociación de Víctimas del Metro, que "continuará con la lucha de exigir respuestas a las muchas incógnitas" que rodean el accidente que costó la vida a 43 personas, destaca Enric Chulio.

La mayoría popular puede suponer "un desastre para la huerta y la preservación del paisaje", temen en Per L'Horta, que coincide con Xúquer Viu en exigir que los partidos cuenten con los movimientos sociales más allá del proceso electoral. La protección del Júcar "no debe someterse a vaivenes políticos", advierte la plataforma.