_
_
_
_
Reportaje:Fútbol | 36ª jornada de Liga

El símbolo de la contradicción

Beckham refleja el éxito del vestuario frente a los errores de gestión del Madrid y su técnico

Diego Torres

Después de borrar a Ronaldo del vestuario, Fabio Capello puso en una bandeja la cabeza de Beckham. El técnico del Madrid, que ahora garantiza que es independiente, que no escucha al presidente, Ramón Calderón, y que actúa "solo", a mediados de enero comulgaba con los intereses del club en perfecta simbiosis. "Beckham no va a jugar más", dijo Capello, que por entonces andaba obsesionado con hostigar a la plantilla con mensajes explosivos. "Su decisión es irse a Los Ángeles", prosiguió; "y un jugador que tiene un contrato tan importante con otro club no va a poder jugar con nosotros, y nosotros no vamos a contar con él".

Desde el 13 de enero, fecha en que Capello despachó a Beckham, el jugador le ha desmentido con acciones: un gol, cuatro pases de gol, dos córners que acabaron en gol y la complicidad necesaria en la jugada del tercer gol al Recreativo, imprescindible para sostener al equipo en el liderato.

"Su marcha al Galaxy ha sido precipitada. Nos hará falta", dice Van Nistelrooy

La trayectoria de Beckham revela un error grave del club y de Capello. Beckham simboliza las contradicciones en la gestión deportiva del Madrid. Algo que no es exclusividad suya, sino que comparte con otros damnificados como Guti, Helguera, Robinho y Cassano. Los cinco fueron borrados de los planes de Capello, pero en algún momento de la temporada resultaron decisivos. Hoy, el Madrid está a un paso de ganar la Liga gracias a ellos. Una parte de los aplausos que la concurrencia del mesón predilecto del italiano dedica a Capello en las noches de partido se la debe el entrenador a los futbolistas que despreció y que, en ocasiones, incluso llegó a difamar.

Beckham hizo su mejor partido de la temporada el sábado pasado frente al Deportivo. Se movió por las dos bandas como un extremo puro, centró con la zurda en el primer gol del Madrid, puso con la derecha un pase que cayó en la cabeza de Raúl en el segundo y participó en la jugada del tercero. Al terminar el encuentro, brindó su camiseta al grupo Ultras Sur, como siempre, y se marchó sin hacer declaraciones.

Después de cuatro años irregulares, en los que Beckham ha forzado expulsiones para irse a los Alpes con su esposa o ha preferido no jugar alegando lesiones musculares cuando la situación del equipo era crítica, la impresión de la grada ahora es que se marcha un futbolista con mucho fútbol en las piernas. Esto es lo que razonan algunos de sus compañeros, como el goleador de la Liga, Van Nistelrooy. "Me parece pronto para que David [Beckham] se vaya a Estados Unidos", dijo el holandés el sábado; "tal y como está jugando, me da la impresión de que su fichaje por el Galaxy ha sido un poco precipitado. Tal vez podría jugar cedido con nosotros cuando no coincidan la Liga española con la de Estados Unidos. Nos haría falta".

Tal vez Beckham experimente una frustración creciente. Cuando decidió firmar por el Galaxy, en diciembre pasado, estaba convencido de que Capello no contaba con él. Creía que no jugaría más con el Madrid. En los corrillos del club, Capello decía que el inglés era algo parecido a un futbolista virtual, sin sustancia, sin coraje. Para justificar su opinión echó mano de la estadística: Beckham fue titular en cinco ocasiones en las primeras 16 jornadas y en esos partidos el Madrid sumó tres derrotas (Sevilla, Recre y Getafe), un empate (Villarreal) y una victoria (Levante).

Los responsables del Madrid creyeron que la opinión de Capello era inquebrantable. "Beckham sabe que con Fabio no volverá a jugar y él quiere jugar", dijeron anticipándose al desenlace frustrante de las negociaciones de renovación. A modo de coda, Calderón pronunció un discurso en la Universisdad Complutense en el que calificó a Beckham de "medio actor".

Calderón le imaginaba en Hollywood. Si hubiera sido cierto, hoy el Madrid no sería líder.

Beckham se despide del Bernabéu el sábado pasado.
Beckham se despide del Bernabéu el sábado pasado.RICARDO GUTIÉRREZ

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Diego Torres
Es licenciado en Derecho, máster en Periodismo por la UAM, especializado en información de Deportes desde que comenzó a trabajar para El País en el verano de 1997. Ha cubierto cinco Juegos Olímpicos, cinco Mundiales de Fútbol y seis Eurocopas.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_