El tribunal del 11-M recibe el documento que permite proceder contra Díaz de Mera
La Audiencia enviará en breve al Supremo una exposición sobre el caso de desobediencia
El tribunal del 11-M recibió el pasado jueves el certificado del Parlamento Europeo que acredita la condición de eurodiputado del que fuera director general de la Policía durante el último Gobierno del PP, Agustín Díaz de Mera. El documento permitirá a los magistrados instar un proceso ante el Tribunal Supremo por delito de desobediencia grave, ya que el europarlamentario popular, durante su declaración del pasado 20 de marzo, se negó a revelar la identidad de un policía que supuestamente le habría informado de la manipulación de un informe sobre los vínculos entre islamistas y ETA.
El tribunal ordenará la próxima semana la transcripción del vídeo de la sesión en la que Díaz de Mera se negó a acatar la decisión del presidente de que revelara la supuesta fuente de su conocimiento y que ya le supuso una multa de 1.000 euros. La transcripción, junto con una exposición razonada que elaborará el presidente y ponente de la causa, Javier Gómez Bermú-dez, será elevada a la Sala Segunda del Tribunal Supremo, la competente para proceder contra parlamentarios europeos de nacionalidad española.
Mientras tanto, el tribunal decidirá también si ejecuta la sanción de 1.000 euros o espera a la resolución del proceso penal.
El alto tribunal podrá incoar un proceso contra Díaz de Mera, para lo que deberá tramitar el correspondiente suplicatorio al Parlamento de Estrasburgo, o archivar el caso si considera que los hechos no son constitutivos de delito a la vista de que el ex director general de la Policía proporcionó la información requerida por medio de una carta dirigida al Tribunal, días después. El Supremo podría decidir también perseguir a Díaz de Mera por delito de falso testimonio si considerase que no dijo la verdad durante su declaración.
El eurodiputado popular fue preguntado en el juicio por un supuesto informe, encargado por el ex comisario general de Información Telesforo Rubio, sobre posibles relaciones entre islamistas y miembros de ETA, y que habría sido ocultado o manipulado al ser contrario a la versión oficial. De Mera afirmó que ni había visto el informe, ni conocía a los autores, ni su contenido, sino sólo la generalidad.
Pero cuando se le preguntó por la persona que le había informado de esos extremos, el europarlamentario se negó a revelar su identidad, ya que se trataba de un policía que podría ser represaliado. El tribunal, sin embargo, le exigió que revelase la fuente y, como el político se negó, le impuso una multa de 1.000 euros y le apercibió de la apertura de un procedimiento contra él.
En ese momento De Mera se enrocó, pero tras el repudio generalizado de su actitud, incluido el de su propio partido, días después reconsideró su decisión y envió una carta al tribunal en la que señalaba que su fuente era el comisario Enrique García Castaño.
El problema es que García Castaño compareció en el juicio una semana después y desmintió punto por punto lo dicho por Díaz de Mera. Aseguró que éste le había pedido que le ayudase porque su situación era muy delicada, pero que él se había negado porque no existe ningún vínculo de ETA con el 11-M. Agregó que la UCI hizo un informe titulado Hipotéticos vínculos entre islamistas y ETA, pero que, además de estar incorporado al sumario, concluye exactamente lo contrario de lo manifestado por Díaz de Mera.
El ex director general de la policía mencionó también que el comisario Domingo Pérez Castaño habría sido represaliado y trasladado al País Vasco por negarse a alterarlo y eliminar los vínculos con ETA y que el comisario José Cabanillas se habría encargado de "retocar" el dictamen, en cuya redacción final habrían intervenido un hombre y una mujer.
Pues bien, Pérez Castaño aclaró en una carta que no había sido represaliado, sino que había pedido su traslado a la comisaría de Latina antes de que le hubieran encargado el informe y los demás señalados comparecieron luego en el juicio. Cabanillas dijo que el informe lo hicieron los dos jefes de las secciones de ETA de la UCI y que él nunca se hubiera atrevido porque no es experto en la banda terrorista. En definitiva, que Díaz de Mera, mintió o cuando menos estaba mal informado.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.