"Los fotógrafos deben probar nuevos soportes"
El caso de Raymond Depardon es bastante singular y no muy frecuente, ya que se le reconoce y goza de prestigio tanto por su obra fotográfica como por sus trabajos cinematográficos. En ambos campos su mirada es la del documentalista, tarea que desarrolla con incuestionable independencia. Es miembro de la agencia Magnum y en el año 2006 fue director artístico de los Rencontres d'Arles. En PHotoEspaña se presenta su trabajo Personalidades políticas, una propuesta sobre la que ha manifestado que le interesaba especialmente la soledad del personaje político. Paralelamente, se presenta en la Filmoteca Española una retrospectiva de su obra cinematográfica, de la que se acaban de editar en DVD (en el sello Intermedio) cuatro de sus películas: San Clemente, Urgencias, Delitos flagrantes y 10ª Sala. Instantes de audiencias.
PREGUNTA. El año pasado fue usted director artístico en Arles. ¿Cómo fue su experiencia en el festival?
RESPUESTA. Una experiencia muy enriquecedora. Una mezcla de fidelidad con mis compañeros de viaje y de descubrimiento de nuevos talentos.
P. ¿Cómo ve la situación de los festivales de fotografía y qué opinión le merece el que se vayan abriendo hacia el territorio de la imagen en general?
R. Los fotógrafos viven frecuentemente en la frustración, los festivales contribuyen a romper su aislamiento, esto es algo bueno, pero la evolución de las artes plásticas es rápida y el fotógrafo no puede quedarse sólo en su universo de imágenes fijas, sino que debe evolucionar y experimentar con otros soportes.
P. ¿Cómo ve el estado actual de las prácticas documentales?
R. Las cosas evolucionan; por un lado, en el documental están los reporteros asalariados de la información, que son buenos técnicos, y por otro, una línea más personal y artística, asumida. Lo importante es no estar entre los dos.
P. Su presencia en PHotoEspaña cubre dos vertientes, su obra fotográfica y su obra cinematográfica. ¿Cómo compagina su trabajo en estos dos medios?
R. Desde hace tiempo combino los dos soportes, fotografía y cine, con más o menos armonía, aunque sobre algunos temas es difícil. Serge Daney, un crítico francés, decía que quería hacer milagros. Hoy tengo encargos, por ejemplo de la Fundación Cartier para el Arte Contemporáneo, que me piden las dos cosas, imagen fija e imagen en movimiento, ahí está el futuro.
P. En PHotoEspaña presenta su exposición Personalidades políticas. ¿Cómo ve el mundo de la política y qué intenta captar de los que son sus principales actores, los políticos?
R. El fotógrafo y el político son dos extraños personajes, es una confrontación siempre apasionante entre la imagen y la mirada, y también es un duelo.
P. Acaba de celebrarse un proceso electoral en su país, que ha suscitado bastante interés. ¿Cuál es su opinión sobre el mismo?
R. No he trabajado en la campaña de las últimas presidenciales. Ha sido muy viva y el fotógrafo ha estado muy solicitado. La imagen fija juega siempre un papel en la elección de los ciudadanos. Siempre he afirmado que quedan tres ámbitos en los que la fotografía sigue siendo decisiva: la política, el deporte y la guerra. A pesar de la fuerza de la televisión, la fotografía no ha desaparecido.
P. ¿Sigue existiendo un espacio para la crítica social y el compromiso tanto en la fotografía como en el cine?
R. Sí, por supuesto, quizás lo que ha cambiado son las formas del compromiso y de la crítica social, pero la fuerza visual siempre está ahí, teniendo en cuenta que hace falta esa fuerza, esa capacidad para plantear interrogantes en el aluvión de imágenes cotidianas.
P. ¿Cómo aborda la relación entre ficción y realidad en su obra?
R. Creo que son necesarias la una y la otra para tocar la sensibilidad del espectador. Si decido filmar con una imagen y un sonido ciertos ambientes judiciales, por ejemplo, estoy convencido de que la imagen fija puede tener un cierto impacto, es una historia de memoria de la imagen que puede actuar sobre nuestra conciencia de ciudadano.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.