'Casting' de modelos en los suburbios de París

La famosa agencia de modelos Élite organiza de forma permanente castings en busca de talento y de caras nuevas para renovar su oferta, a los que anualmente se presentan unas 10.000 chicas. Por lo general tienen lugar en unos grandes almacenes del centro de las grandes ciudades. No hace falta inscribirse. Basta con acudir a la hora fijada "con poco maquillaje, preferentemente sin ninguno, con una ropa sencilla, vaqueros o falda, y zapatos de tacón".

La novedad es que el pasado miércoles tuvo lugar en una localidad de la periferia parisiense y las aspirantes a modelo respondían a la extraordinaria mezcla étnica y cultural que caracteriza los suburbios de la capital francesa.

Más de 150 chicas de entre 14 y 20 años acudieron a la convocatoria de Belle-Epine de Thiais, un centro comercial del departamento de Val-de-Marne, al norte de París. Como explicaba el diario Le Figaro, "en las barriadas, si los chicos quieren todos ser Zinedine Zidane, las chicas sueñan con ser la próxima Naomi Campbell".

Las más jóvenes acompañadas por sus madres, otras con un grupo de amigas, formaban un curioso mosaico compuesto por una gran variedad de tipos físicos; desde africanas de piel oscura y pelo rizado a magrebíes, pasando por rostros con matices asiáticos y toda clase de mestizajes, además de unas cuantas rubias de ojos azules, no necesariamente de pura cepa francesa, sino de origen eslavo o centroeuropeo.

Pero la variedad física no era tanto el objetivo de la gente de Élite, que realizan castings en todo el mundo (concretamente, las últimas semanas tuvieron lugar en los departamentos franceses del Caribe como La Martinica o Guadalupe, y en la isla de la Reunión, en el Índico), sino el espíritu de las barriadas, la identidad mestiza de la Francia urbana, más allá de los rasgos étnicos.

Finalmente, de las 150 jóvenes que se presentaron la agencia seleccionó 17, la mitad de las cuales eran de origen africano o magrebí.