Gas Natural pagará 37 millones a Iberdrola al perder la pugna por un contrato firmado en 2002

A veces como hermanos, pero como primos, nunca. Iberdrola y Gas Natural llegaron en 2005 a un acuerdo que facilitaba a la gasista el asalto a Endesa, pero han peleado con uñas y dientes por el contrato de suministro de gas, con una duración de 17 años, que firmaron ambas compañías en el año 2002. Iberdrola, compradora del gas (1.300 de millones de metros cúbicos al año) solicitó -y ha obtenido- una rebaja de precios. Gas Natural se negaba a ello alegando los cambios registrados en el mercado.

Un laudo dictado el pasado viernes por tres árbitros (dos elegidos por las partes y uno neutral) da la razón a Iberdrola en la demanda de revisión del contrato que presentó el 20 de septiembre de 2006. El laudo establece que Gas Natural tendrá que rebajar en un 4,27% los precios que venía aplicando a Iberdrola y tendrá, además, que pagar a Iberdrola la diferencia entre lo facturado desde abril de 2004 hasta hoy y lo que debería haberse facturado con la nueva fórmula. Con los intereses devengados (Euribor a tres meses), Gas Natural tendrá que pagar a Iberdrola 37 millones de euros, según fuentes conocedoras de la decisión.

Diferencias

El núcleo de las diferencias entre la compañía gasista e Iberdrola se centraban en el precio y en el hecho de que la eléctrica que preside Ignacio Sánchez Galán defiende su derecho a destinar el gas adquirido a Gas Natural no sólo a sus centrales de generación eléctrica sino, eventualmente, también a su negocio en el sector del gas, dentro y fuera de España.

El contrato entre ambas compañías se firmó en 2002, cuando el mercado gasista apenas si apuntaba a la liberalización y a la competencia. Las perspectivas de una y otra compañía eran, entonces, muy distintas. El mercado internacional se movía en la abundancia y el mercado interno no conocía la guerra de ofertas, con descuentos de hasta el 15% sobre las tarifas oficiales, que vendría poco después.

A la vista de las nuevas circunstancias, Iberdrola reclamó a Gas Natural una revisión de los términos del contrato, con solicitud de rebaja en el precio de hasta el 15%. No lo ha conseguido. La rebaja se queda en el 4,27%. No es todo lo reclamado pero es más de lo que esperaba Gas Natural. Lejos de las tesis de la eléctrica, Gas Natural solicitó a los árbitros una revisión al alza de los precios acordados. Alegó para ello los cambios registrados en el mercado internacional del gas, con una creciente escasez y carestía de la materia prima. Con esos argumentos, Gas Natural cifró el perjuicio sufrido por mantener los términos del contrato en más de 150 millones de euros y estimó adecuada una posible subida de los precios

Fuentes de la gasista destacaron ayer que las diferencias de interpretación de contratos son algo habitual en el negocio. Asimismo señalaron que el laudo no da toda la razón a la eléctrica. Sobre los 37 millones de euros que, en principio, debe pagar a Iberdrola, la compañía explicó que el laudo no precisa cantidad concreta.

Contra el laudo cabe interponer el llamado "recurso tasado" previsto en la Ley de Arbitraje. Dicho recurso, según fuentes jurídicas, puede cuestionar la actuación concreta de los árbitros en el proceso, pero no la resolución. Gas Natural no ha decido aún si recurrirá.