La chaquetera convencida

En el bar que la madre de Susana Vázquez regenta en el concello orensano de Porqueira el café cuesta 80 céntimos. Es el único vínculo que le queda a la alcaldesa y ahora candidata del PP con el partido de la rosa. "El precio era así antes de que Zapatero apareciese en el programa de televisión Tengo una pregunta para usted", aclara.

Susana Vázquez es una chaquetera convencida: "Me resbala lo que se está diciendo de mí. Desde siempre he querido hacer cosas por mi pueblo. La gente me apoya. Se comprobará el día 27 en las urnas".

En las pasadas elecciones se presentó con la camiseta del PSdeG. Sacó un concejal, lejos de los cuatro conseguidos por el BNG y el Partido Popular, que llevaba 18 años gobernando en Porqueira. Gracias a los intrincados misterios de los pactos, la joven candidata de 30 años acabó sentada en la alcaldía por los 121 votos recibidos.

Vázquez se votó a sí misma en el Pleno y la respaldaron los cuatro concejales del PP

Fue la primera regidora española declarada tránsfuga por el Congreso

No hubo oferta formal: "Baltar me dijo que yo era su candidata y no se habló más"

Siguiendo las directrices que llegaban de Santiago, Gonzalo Iglesias, el coordinador comarcal de los socialistas, negoció con el BNG para dar la patada a los populares. "No llegamos a un acuerdo. Pedíamos la primera teniente de alcaldía y nos daban la segunda. Un buen día me dijo que en Porqueira no había pacto, pero que tenía que votar al candidato del BNG aunque me quedase fuera del Gobierno. Consulté con la gente de mi lista y no aceptamos", recuerda ahora la alcaldesa. Susana Vázquez se votó a sí misma en el Pleno celebrado a mano alzada para elegir alcalde y la respaldaron los cuatro concejales del Partido Popular.

Comenzó la bullanga por haberse declarado en rebeldía. "El PSdeG me echó del partido y tiene gracia, porque yo era independiente, Tampoco ahora me he afiliado al PP", comenta. Pero el asunto no quedó ahí. La denunciaron por cohecho: "Decían que me habían dado 126.000 euros, que José Luis Baltar me había colocado en la Diputación de Ourense, que me habían regalado un coche, un piso... Vamos, que tendría la vida resuelta".

El juzgado de Xinzo de Limia archivó el caso a finales de 2003, pero el PSdeG recurrió ante la Audiencia de Ourense. "Y en agosto de 2006 la Audiencia también lo archivó. A los pocos días nació Celia, mi hija. Debe ser cierto que los niños vienen con un pan debajo del brazo. Por lo menos traen buenas noticias".

Susana Vázquez es diplomada en Empresariales y niega cualquier trato de favor de José Luis Baltar, presidente de la Diputación y líder del PP en Ourense, para que desobedeciese a su anterior partido: "Lo conocí después de ser alcaldesa. Yo cobro 955 euros por dedicación exclusiva en el Concello, mi madre sigue con el bar y la panadería, mi marido es jefe de obra en una empresa privada, una hermana está terminando el Doctorado en Psicología y la otra trabaja en la vidriera de Xinzo". No desmiente, sin embargo, que Baltar se ha volcado con Porqueira.

El presupuesto de este pequeño municipio de algo más de 1.100 habitantes ha engordado de 500.000 al millón de euros: "Le estoy muy agradecida. Todo lo que le hemos pedido nos lo ha concedido. Las brigadas de obras, las de riego..." Lo de las obras se nota en el cénit de la campaña electoral.

Como en Porqueira, Ourense parece estar en pie de guerra. Antes de salir del municipio tres operarios se afanan en la limpieza de las cunetas.

Susana Vázquez fue la primera regidora española declarada tránsfuga por el Congreso de los Diputados, pero se coló como cabeza de lista del Partido Popular para las elecciones municipales del próximo día 27 por una rendija legal, ya que la ley no tiene carácter retroactivo.

El PP la apoyó en la Comisión Antitransfuguismo argumentando que no había cambiado de chaqueta porque "se votó a sí misma". Ahora sí lo hace, aunque no puede precisar el momento en el que Baltar le ofreció encabezar la lista: "No hubo una oferta formal. Me dijo que para el PP yo no era una tránsfuga, que era su candidata y no se habló más".

Su asilo político en el partido de la gaviota y el salario por la dedicación exclusiva vertebra la campaña de Xosé Manuel Pérez, cabeza de lista del BNG. A Vázquez le sigue resbalando: "Como no tiene nada que proponer me ataca a mí. Además, ni siquiera vive en Porqueira".

Esta candidata chaquetera sólo se arrepiente de una cosa: "Le dedico tantas horas al Concello, mañana y tarde, que a veces me entra cargo de conciencia por no dedicarle más tiempo a mi hija. Mi baja maternal fue sólo de siete días. Y la gente de aquí lo sabe".