Suez se refuerza en Gas Natural a la espera de movimientos en el sector
La Caixa valora positivamente la nueva posición del grupo francés, que es ya tercer accionista
El grupo francés Suez ha invertido 1.000 millones en Gas Natural para convertirse en su tercer accionista, tras La Caixa y Repsol, en una operación valorada "positivamente" por la caja. Suez, que controla ya un 11,3% de la gasista en el marco de su "expansión por Europa", da el paso cuando está pendiente su fusión con Gaz de France. El grupo que preside Gérard Mestrallet ve "compatibles" ambas apuestas, pero los analistas relacionan este refuerzo en España como un posible plan b. El mercado espera que Gas Natural protagonice una operación y Suez tendrá un papel relevante en ella.
Suez, como todo el mundo daba por hecho y nadie confirmaba, estaba tras las misteriosas compras de acciones de Gas Natural de las últimas semanas. Y esta compra de acciones permite a Suez tomar una buena posición en la gasista española cuando el mercado espera que la empresa, deseosa de unirse a una eléctrica y que ha intentado en vano casarse con Iberdrola y con Endesa, protagonice una nueva operación corporativa.
Aunque la compañía francesa aseguró estar "cómoda" con su nueva participación, Suez jugará un papel en cualquier partida que se plantee, ya sea la vieja idea del presidente de La Caixa, Ricard Fornesa, de unir Gas Natural con Agbar, ya sea la de unir la gasista con una eléctrica, con o sin Repsol. El banco UBS consideró de inmediato "razonable" que Suez aumente su participación, aunque "probablemente no tiene prisa para hacerlo".
"Marco amistoso"
Fuentes próximas a la operación subrayaron que la compra de acciones de la gasista ha discurrido "en un marco amistoso", y también que Suez ha comunicado oficialmente la toma de participación a Gaz de France -con la que teóricamente sigue queriendo fusionarse- a La Caixa, a Repsol y a la propia Gas Natural, "una vez realizada la operación". Pero otras fuentes insistieron en que es la propia Caixa quien ha pedido a Suez que apueste por su participada.
La caja que dirige Isidre Fainé, aliada de Suez en Gas Natural y en Aguas de Barcelona (Agbar) desde hace años, desmarcó lo ocurrido de "los intereses de la Caixa en la sociedad gasista". Pero a la vez corrió a valorar "positivamente" la toma de posición de Suez y a elogiar la "buena experiencia conjunta" que supone el funcionamiento de Hisusa. La sociedad Hisusa, participada por Suez en un 51% y por La Caixa en el otro 49%, es el instrumento a través del que Suez y La Caixa controlan conjuntamente Agbar. Además, Hisusa tiene un 5% de Gas Natural.
Al margen de ese 5% que controlaba a través de su mayoría en Hisusa, Suez poseía ya un 0,4% del capital de la gasista de forma directa. Ayer informó de que ha comprado otro 4,55% y de que ha concluido un acuerdo que le garantiza la adquisición de otro 1,35%. En total, Suez se ha hecho con un 5,9% más, que eleva su participación efectiva al 8,8% y el control de un 11,3% en Gas Natural. Para pasar del 10%, requiere el sí de la Comisión Nacional de la Energía (CNE)
A pesar de los pronunciamientos oficiales, el anuncio de ayer parece alejar aún más la fusión entre Suez y Gaz de France. La operación lanzada en febrero de 2006 por el recién dimitido primer ministro, Dominique de Villepin, para frenar la posible oferta púbica de adquisición (OPA) de la italiana Enel sobre Suez y reforzar a la gasista pública francesa no interesa al nuevo presidente francés, Nicolas Sarkozy. La operación, además, había encontrado todo tipo de obstáculos. A ella se oponen los sindicatos y la izquierda.
Pese a su retórica proteccionista, Sarkozy no comparte los principios del "patriotismo económico" de Villepin. En la reciente campaña electoral, el mismo día que Suez anunció un beneficio neto de 3.600 millones de euros en 2006, el entonces candidato de la derecha se preguntaba por la "pertinencia de juntar Gaz de France, que compra gas con otro comprador", en alusión a Suez.
Sarkozy, que insiste en la creación de un gigante gasista, ha insistido en que lo ideal sería unir a un distribuidor como Gaz de France con un productor, y ha apuntado a una alianza con argelina Sonatrach, pensando en sus reservas. Pero ayer mismo, fuentes del Gobierno argelino citadas ayer por el diario Les Echos indicaron que Sonatrach ha excluido una alianza con GDF.
Un aliado galo tras el adiós a Endesa
El refuerzo en Gas Natural es la segunda operación de calado protagonizada en España y en el último mes por Suez, que controla el 8% del mercado de la energía francés y el 97% de la belga Electrabel. La primera fue la oferta pública de adquisición (OPA) conjunta anunciada por la empresa francesa y por La Caixa sobre el capital de Aguas de Barcelona (Agbar) que no controlaban, para blindarla de ataques.Ya entonces, Suez insistió en la "confianza recíproca" que mantiene con La Caixa. Ésta ve en su viejo socio francés un aliado posible para conformar un conglomerado energético. Está por ver cómo engarza esta sintonía con el papel tradicional de socio industrial y técnico de Gas Natural que encarna Repsol. La petrolera, con un 30,8% de la gasista, reivindicó ayer ese papel, que plasma un acuerdo parasocial de control conjunto entre La Caixa y Repsol.Si Suez insistió hace un mes en su apuesta por el sector del agua y los servicios en España,ayer lo hizo en el atractivo de Gas Natural por su "liderazgo del mercado del gas", su peso en el negocio del gas natural licuado (GNL) y sus lazos en América Latina y Argelia. Suez cree que un pie en Gas Natural la ayuda en su "expansión dinámica en los mercados energéticos y de medioambiente en Europa". Suez asegura estar "cómoda" en la gasista y no tiene previsto aumentar su participación. También le parece "prematuro" pedir consejeros.Pese a ello, Gas Natural se disparó en Bolsa un 6,3% y cerró a 44 euros. La gasista opina que la apuesta de Suez "confirma la buena marcha de sus negocios y positiva senda de crecimiento futuro".
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