La candidata del PP lanza su artillería contra Rodríguez Zapatero
La presidenta cree que si ella repite, Rajoy llegará a La Moncloa
Ayer, viaje al "corazón del PP". El lugar es Valdemoro (48.500 habitantes), municipio gobernado por José Miguel Moreno (PP), y la cita es en la plaza de toros. Allí se estrena Esperanza Aguirre como mitinera en esta campaña. Es, pues, terreno favorable. Y no decepciona a sus fieles, unas 4.000 personas que reciben a plomo el sol sobre sus cabezas. Hay gorras naranjas del PP y sombreros de paja. También mucho abanico.
Esperanza Aguirre pide el voto para su equipo por el sistema del lobo. "Es importante que gobernemos la Comunidad de Madrid, porque si no vendrá el bipartito y no sabemos ni qué quieren hacer", asegura en referencia a la supuesta coalición entre PSOE e IU en caso de ganar en escaños al PP en las autonómicas.
"Es muy importante", insiste, "que el Gobierno de la Comunidad de Madrid repita. Porque es el paso fundamental para que Zapatero haga las maletas y Rajoy vaya a La Moncloa". Es el colofón de un discurso cuajado de referencias al Gobierno central. Porque ésa es la estrategia del PP para esta campaña madrileña: el conflicto principal es con Zapatero. Pero para llegar hasta él, Aguirre no olvida que tiene que vender su gestión y va de lo local a lo nacional.
La presidenta-candidata recuerda primero el caso Ciempozuelos (dos ex alcaldes socialistas acusados de presunta corrupción y blanqueo de dinero en Andorra), que queda muy cerca para los vecinos valdemo-reños. Pasa por las denuncias de corrupción contra socialistas en Ibiza, por las realizadas por el ex presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, Manuel Conthe. Por el camino, Aguirre menciona la detención de Isabel Pantoja. Se anima y ataca con el "escándalo de ANV". "Gracias a Zapatero, ETA-Batasuna va a volver a los ayuntamientos", espeta. "¡Zapatero, embustero!", corean los asistentes.
La plaza llega a la ebullición y ella se dispara. "A los españoles no les va a pasar desapercibido ninguno de estos acontecimientos: ni que ANV vuelva a los ayuntamientos, ni que De Juana Chaos se pasee por la calle como un turista", lanza al público. "¡Es un escándalo!", apostilla.
Aguirre tiene una relación cálida con la gente, que a veces convierte las situaciones en surrealistas. "En esta campaña hay que volcarse en explicar nuestras propuestas", avanza la candidata autonómica por su discurso. "¡Viva tu madre!", grita alguien desde los asientos. Y ella responde: "A mi madre, cuando le digo eso que me decís, se emociona".
Ella continúa con su gestión. "En esta legislatura hemos hecho cada día 12.000 plazas para mayores", dice. "¡Esperanza, Esperanza, que hace falta un hospital para Arganda!", tercia una espectadora. "¿Arganda? Pero si ya tiene hospital", contesta la candidata. "Otro, otro, pero para los minusválidos", replica la asistente. Aguirre da por zanjadas las conversaciones. "Vamos a hacer este mitin menos participativo", reprende.
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