Kafka y Dante

En un mundo tan movido e inestable como el de la televisión es un milagro que sobrevivan algunas fórmulas perdurables como Saber vivir (TVE). Entre sus colaboradores más constantes está la especialista en nutrición Maria Josep Rosselló. Ayer, aprovechando que el programa trataba, entre otros, de los trastornos provocados por las distintas formas de menopausia, Rosselló dio algunos sensatos consejos alimenticios y comentó: "El gran amigo de la mujer en esta época es el pescado". Sacada de contexto, la frase tiene miga, ya que si repasamos los amigos que, a lo largo de su vida, tienen mujeres y hombres, observaremos una evolución la mar de interesante e instructiva en lo que a afinidades entre especies se refiere. Primero buscamos amigos con los que jugar. Luego, decepcionados o aburridos, puede que encontremos en la compañía de los perros y gatos un tipo de lealtad que sacie nuestras expectativas en la materia. Más adelante, es más que probable que suframos una de esas reacciones químicas que desembocan en un amor con algún humano bípedo que, en el mejor de los casos, nos proporciona unos meses de sexo, varios años de dependencia emocional y décadas de decepción. En semejante paisaje reconforta saber que, al llegar la época de la menopausia, la mujer puede contar con las virtudes nutritivas del pescado.

Ayer, sin embargo, no todo fueron buenas noticias. Todos los programas de actualidad hablaron de la trágica explosión de Palencia, a veces incluso recurriendo al truco de, después de especular, decir que no es bueno especular en estos casos. En Espejo público (Antena 3), durante la tertulia, cuando hablaron del accidente de Palencia, uno de los tertulianos insistió en utilizar el adjetivo dantesco, tan resultón para esta clase de situaciones, mientras que Susana Griso subrayaba lo kafkiano de una parte del anecdotario trágico. Durante unos minutos, deseé que Kafka y Dante utilizaran el teléfono de aludidos y llamaran para protestar por el mal uso que se hace de sus respectivos legados.