Poco fiable

La Bolsa española consiguió ayer una discreta recuperación forzada por las circunstancias, en este caso la conquista por Nueva York de nuevos máximos históricos, y todavía con el sector inmobiliario aportando un lastre complementario.

El Ibex 35 consiguió una subida del 0,29% después de tres sesiones consecutivas de descensos y quedaba al cierre en 14.416,90 puntos, una zona tan neutra como el comportamiento de los inversores. El Ibex de las empresas medianas subió el 0,97% y el de las pequeñas bajó el 0,25%.

La jornada comenzó con una llamativa escasez de presiones vendedoras que se tradujo en una mejora general de las cotizaciones, pero muy pronto el sector inmobiliario se desmarcó del conjunto y con sus caídas frenó el escaso ímpetu comprador. El Ibex 35 llegó a situarse en 14.462,90 puntos, con una ganancia del 0,61%, pero el mercado español continúa siendo poco fiable para la inversión externa, a pesar de que varias empresas españolas se encuentran en estos momentos inmersas en importantes operaciones corporativas como compradoras.

Los indicadores económicos publicados ayer consiguieron animar al resto de los mercados de la eurozona, hasta el punto de que Francfort y París alcanzaban nuevos máximos anuales en sus principales índices.

En Estados Unidos, el dato de pedidos a fábrica del pasado mes de marzo, con una subida del 3,1%, logró llevar a la Bolsa hasta nuevos máximos históricos, esta vez por encima de los 13.200 puntos. El leve descenso del precio del petróleo ayudaba a dibujar un panorama económico más atractivo que los inversores españoles contemplaban con desconcierto.

La contratación en el Mercado Continuo se mantuvo en línea con la de las sesiones anteriores, con 6.431,63 millones de euros, de los que 3.936,54 millones procedían del mercado abierto.