Cultura paraliza el traslado de obras del convento de Sant Josep

La Dirección de Patrimonio de la Consejería de Cultura ha decidido la paralización cautelar del desmontaje del interior del convento de Sant Josep de Valencia, que las monjas carmelitas han vendido a la empresa de Francisco Roig para su conversión en hotel, y la inmovilización de las obras ya trasladadas. Los técnicos visitaron ayer el templo (bien de relevancia local) y señalaron que el antiguo material cerámico se ha trasladado para su almacenamiento "al convento que la congregación de Carmelitas Descalzas tiene en el término de Serra". Al parecer, la cerámica fue arrancada de la pared con un pico y una pala. "El retablo se ha llevado a la iglesia de San Juan de la Cruz, inmueble que goza del máximo grado de protección patrimonial (BIC)".

El convento de San José y Santa Teresa, de principios del siglo XVII, es bien de relevancia local y se halla en el centro histórico, en una zona declarada BIC, por lo que necesita la autorización de Patrimonio.

Todas las piezas trasladadas por la orden carmelitana están documentadas por Patrimonio. Por ello, los técnicos podrán identificarlas, comprobar el estado de las mismas y su ubicación, así como proceder al seguimiento y control de las obras.