Iniciativa y ERC fuerzan a Nadal a posponer hasta después de las municipales un estudio sobre el Cuarto Cinturón

Por enésima vez, la polémica obra del Cuarto Cinturón ha vuelto a causar revuelo entre los socios del tripartito. En esta ocasión con motivo de un estudio sobre el impacto de la obra que el consejero de Política Territorial, Joaquim Nadal, sacó a concurso por la vía de urgencia y sin que sus socios de Esquerra e Iniciativa supieran nada. De hecho, éstos sólo supieron de su existencia hasta ver la convocatoria publicada en el Diario Oficial de la Generalitat. El enfado de los ecosocialistas, pero también de los republicanos, fue tal que el pasado lunes exigieron a Nadal aparcar el estudio hasta después de las elecciones municipales.

El Departamento de Política Territorial cedió finalmente a las exigencias de ICV y ERC en una tensa reunión a la que, además de los portavoces parlamentarios de los grupos del tripartito, asistieron el secretario de Movilidad, Manel Nadal y el secretario general de Medio Ambiente, Ricard Pallejà. Ni Iniciativa-Esquerra Unida, ni ERC, ni los socialistas, ocultaron ayer en el Parlament que el acuerdo alcanzado tiene mucho que ver con la proximidad de las municipales. "Quizá no era el mejor momento para sacar el estudio a concurso", admitió el portavoz adjunto del PSC, Joan Ferran, después de escuchar duras palabras por parte de Jordi Miralles (ICV-EUiA) y Joan Ridao (ERC). El primero dijo abiertamente que a su partido "le gusta conocer con anterioridad los proyectos del Gobierno". Ridao se pronunció en términos parecidos pero, a diferencia de Iniciativa, no mostró su rechazo a la obra del Cuarto Cinturón. De hecho, la estrategia de ERC es cambiarle el nombre a la polémica obra para vender lo que está diseñado como una vía rápida orbital sea una especie de "rambla del Vallès", según el lenguaje de los republicanos.

El convergente Felip Puig no perdió la ocasión para sacar tajada de los desacuerdos del tripartido. "Cada día de retraso del Cuarto Cinturón es también un retraso en el avance del país", dijo.

Pero el Cuarto Cinturón no es la única pieza que incomoda a Iniciativa estos días. El Consell Executiu nombró ayer nuevo director general de Energía y Minas, un área que impulsará proyectos como la interconexión eléctrica con Francia a la que se oponen los ecosocialistas. El nuevo director general no es otro que Agustí Maure, quien fuera director de Red Eléctrica de España en Cataluña desde 1985. Maure, defensor de la interconexión eléctrica en numerosos foros, ha sido nombrado por el departamento de Economía, dirigido por el socialista Antoni Castells, y desagrada profundamente a Iniciativa. El portavoz parlamentario adjunto de la formación, evitó ayer hacer ningún comentario sobre el tema. "Esperaremos a ver cómo actúa esta persona", dijo.

En su reunión semanal, el Consell Executiu también acordó ayer el polémico cambio de gestión de los centros cívicos y las oficinas de Bienestar Social. Al final, y por exigencia de ERC, la Generalitat mantendrá el control de estos centros en detrimento de los Ayuntamientos.

El Ejecutivo también consideró la reunión de la Comisión Bilateral en la que se decidió posponer el inicio de las negociaciones para el traspaso de Cercanías. La consejera Mar Serna, que ayer actuó como portavoz, admitió que para este traspaso "no basta con que sólo una de las dos partes se muestre optimista", dijo en relación con el Ejecutivo catalán.