Miles de agricultores, contra la caída de precios

Miles de agricultores, convocados por Asaja, organización cercana al Partido Popular, se manifestaron ayer en Madrid para reclamar al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) medidas urgentes y definitivas que pogan fin a las sucesivas crisis de precios en origen que afectan a las producciones mediterráneas. Las principales preocupaciones son el futuro de frutas, hortalizas y vino tras las inminentes reformas de sus respectivas Organizaciones Comunes de Mercado (OCMs).

Según Asaja, la caída registrada en las naranjas llega hasta el 36%, ya que en 1994 el agricultor percibía 27,26 pesetas por kilo y en la actualidad se sitúa en 17 pesetas. También un litro de gasóleo costaba 50 pesetas en 1994, frente a las 113 pesetas actuales, un 221% más. Los agricultores pretenden que los intermediarios no se queden con los grandes márgenes que existen entre los productores y los consumidores.

La marcha partió pasadas las 11.00 horas de la Puerta de Alcalá bajo el lema "OCMs directamente al agricultor" y transcurrió por la calle Alfonso XII para concluir ante las puertas del Ministerio, donde los manifestantes repartieron frutas y hortalizas a los viandantes. En un ambiente festivo, los agricultores portaban pancartas en las que se podían leer lemas como: "En el campo nos gastamos dos y cobramos uno. ¿Qué nos queda? La ruina". O este otro: "Ayudas directas al agricultor. No contratos, no más chiringuitos". Al tiempo, coreaban consignas como "Zapatero, en el campo no hay dinero" o "Espinosa, los tractores no van con gaseosa".

A su llegada a las puertas del Ministerio, el presidente de la organización agraria, Pedro Barato, se dirigió a los manifestantes, procedentes de la Comunidad Valenciana, Castilla-La Mancha, Andalucía, Extremadura, Aragón y Castilla y León, principalmente. Durante su intervención, Barato dejó claro que la manifestación no era una "marcha política. No tenemos ideología, el sector agrario español es nuestra única bandera". Asimismo, recalcó los precios "ruinosos" que soportan sectores como los cítricos o el vino.

"El esfuerzo hay que repartirlo entre todos, este negocio no puede funcionar con la ley del embudo", señaló Barato, quien reclamó que las futuras OCMs de frutas y hortalizas y vino contemplen ayudas que vayan directamente a los agricultores y "se dejen de enredos". Asaja demanda que la ayuda destinada al sector del vino vaya directamente a la hectárea, sin condicionantes.