Indecisión rota a la baja

Las dos sesiones bursátiles tras la vuelta de las vacaciones se habían caracterizado por los pequeños movimientos. La indecisión y cautela dominaba los mercados. Los altos niveles en los que se ha instalado la Bolsa española así lo aconsejan.

La tendencia, en cambio, se rompió ayer. A la búsqueda de consolidar las cotas alcanzadas en las últimas semanas, los inversores tantearon donde se encuentran las posiciones firmes de la Bolsa española en estos momentos. Con lo que el resultado fue una bajada de un 0,76% del Ibex 35.

Hacía falta que llegara una señal, y llegó de Nueva York. La caída de los índices estadounidenses en la jornada anterior invitó a los mercados españoles a seguir su senda, y así sucedió en la apertura. En poco más de dos horas, el Ibex 35 se dejó más de 200 puntos. También desde el otro lado del Atlántico llegaron señales que no animaban a la inversión: la posibilidad de que la Reserva Federal, según sus actas, suba los tipos de interés y la debilidad del dólar frente al euro (ayer se pagó a precios desconocidos desde diciembre de 2004).

La línea marcada por la Bolsa española no difería de la seguida en los demás grandes índices europeos, salvo que el Ibex lideró las pérdidas y cerró en 14.883 enteros. También cayeron el resto de índices nacionales aunque en menor medida. En el resto del continente, sólo Londres, y de forma tímida, escapó a los números rojos.

Casi todos los valores del índice selectivo español perdieron ayer valor. Gamesa fue la empresa que salió peor parada de la jornada al dejarse el 3.47%, pero el sector más perjudicado fue la construcción. Las cinco grandes constructoras cayeron lideradas por Ferrovial (-2,05%). Incluso ACS, que en los últimos días se ha movido en máximos históricos, cerró con pérdidas. Sólo Repsol, entre los grandes valores, mejoró posiciones (1,09%).