Al menos ocho municipios han agotado su suelo

Al menos ocho municipios andaluces, entre los que están los sevillanos de la comarca de El Aljarafe, San Juan de Aznalfarache o Castilleja de la Cuesta, el malagueño de Fuengirola, o Alfarnaque (Huelva), han construido en todo su término municipal y ahora se plantean hacia dónde crecer. Un grupo de 40 expertos -entre los que hay geólogos, arquitectos o magistrados- hizo público ayer en el Congreso Ecofuturo, celebrado en Marbella (Málaga), un código de buenas prácticas para el desarrollo sostenible en el ámbito turístico-urbanístico con el que pretenden evitar el crecimiento desaforado y el agotamiento de los recursos naturales de Andalucía. Entre ellas se apuesta porque los planes de ordenación contemplen de forma rigurosa los efectos del cambio climático, un mayor control sobre los suelos rurales y la reducción del uso de vehículos a motor en las ciudades para conseguir entornos "más tranquilos".

Los expertos apuestan por controlar los suelos rurales y restringir el uso de vehículos

"Hace cuatro años introdujimos en el plan general de Huelva la necesidad de ordenar los espacios del litoral de la capital teniendo en cuenta las hipótesis más conservadoras en materia de cambio climático y se nos tildó de locos", aseguró el portavoz del panel de expertos Braulio Asensio. El biólogo explicó que los estudios que hoy maneja la demarcación de Costas estiman que habrá un incremento de cinco centímetros en el litoral de España. "Es una situación muy preocupante, porque esos cinco centímetros suponen un cambio en el equilibrio de las playas que difícilmente se pueda superar con la ocupación que tenemos".

El arquitecto José Seguí, redactor del Plan de Ordenación del Territorio de la Costa del Sol Occidental, señaló que casi todos los municipios del litoral malagueño, con los planeamientos vigentes, tienen suficiente suelo para crecer en los próximos 15 ó 20 años", aunque precisó que este desarrollo está condicionado a las infraestructuras, el agua y las inversiones tanto públicas como privadas.

El delegado del Gobierno de la Junta en Málaga, José Luis Marcos, que inauguró las jornadas, aseguró que la provincia malagueña ha experimentado un crecimiento residencial que no ha ido acompañado de la demanda, ya que existen 116.000 viviendas vacías que además resultan inalcanzables para las economías más modestas. "Desarrollo sostenible no es lo mismo que crecimiento cero", mantuvo, "se trata de arbitrar las medidas que pongan freno a la especulación". El delegado se mostró convencido de que la oferta turística complementaria será la que decida en los próximos años a los turistas y auguró una "segunda juventud" desde el punto de vista turístico para la Costa del Sol.