El Ayuntamiento de Calp autoriza un hotel a sólo seis metros del mar

El Ayuntamiento de Calp, presidido por el alcalde Javier Morató, del PP, aprobó la licencia de actividad a Ifach Mar SL, promotora del hotel que se ha empezado a construir a seis metros del mar, siete meses después de que hubiera caducado la autorización de la Dirección General de Puertos y Costas, perteneciente a la Consejería de Infraestructuras y Transporte, emitida en mayo del 2004.

En el informe que envía la Dirección General al Ayuntamiento se resuelve otorgar al promotor Manuel Ferrando, íntimo amigo del alcalde, autorización para efectuar las obras del hotel bajo una serie de condiciones: "Que la autorización quedará sin efecto por vencimiento del plazo de la misma, que será de dos años desde la notificación", que fue el 20 de mayo del 2004. Según el acta del Ayuntamiento, es el 29 de diciembre del 2006 cuando el Consistorio otorga al promotor licencia de actividad tras el informe favorable de la Consejería y omitiendo que había caducado siete meses atrás esta autorización, por lo que las obras, al iniciarse el pasado febrero, carecen de los permisos que requiere la ley. Sin embargo, el concejal de Urbanismo de Calp, José Perles, insiste en que "todos los trámites del hotel se ajustan a la legalidad y cumple todos los requisitos que marca Costas".

La Consejería recoge un informe del Servicio Periférico de Costas, del Ministerio de Medio Ambiente, en el que se recuerda que los tres sótanos que se pretenden construir afectan a la zona de protección, ya que "las construcciones hoteleras están expresamente prohibidas en la zona de servidumbre de protección con el fin de garantizar la conservación y su construcción degradaría el dominio público marítimo". Para el Ministerio "carece de justificación las obras que van a realizarse en la zona de uso público marítimo", al no encontrar necesaria la ubicación de "dos bares, piscina y tres sótanos, obras que afectan al suelo y subsuelo protegido, tan próximas al mar". La Consejería rechazó las explicaciones del Ministerio y reclamó que "la competencia es de la Comunidad Autónoma y no del Ministerio", y añade que "pese a que la construcción degradaría el dominio público, no hay que olvidar que la zona es de titularidad privada". Pese a que la Consejería reconoce que "no son estrictamente necesarios los bares, sí son convenientes ya que en temporada alta se cuenta con mucho turismo".

El hotel será el edificio más alto de los que se encuentran en la playa al superar los 100 metros de altura y contar con 24 plantas, alcanzando una edificabilidad de 15.000 metros cuadrados, cuando debería sólo tener 7.000 metros cuadrados, gracias a una serie de modificaciones que ha realizado el PP en el PGOU.