El entorno etarra reacciona a las detenciones con sabotajes callejeros

Los jóvenes violentos que simpatizan con el terrorismo de ETA han protagonizado, tras varias semanas de inactividad, varios episodios de kale borroka a raíz de las detenciones policiales que han permitido la desarticulación del comando Donosti. Los últimos ataques de violencia callejera fueron perpetrados durante la noche del domingo y estuvieron dirigidos contra una oficina de Correos de Andoain (Guipúzcoa), una sucursal del BSCH de Burlada (Navarra) y un contenedor de basura en Lekeitio (Vizcaya).

En Andoain, la localidad donde fue arrestado el presunto jefe del comando, José Ángel Lerín Sánchez, fue atacada la sede de Correos con cócteles molotov. Los artefactos sólo causaron el ennegrecimiento de la fachada y de una persiana del local.

También de madrugada, desconocidos lanzaron al menos dos botellas incendiarias contra una sucursal del Banco Santander Central Hispano (BSCH) de Burlada. El sabotaje provocó escasos daños en la puerta principal y en un cajero exterior.

La Delegación del Gobierno en Navarra informó de que, sobre las 0.30 horas del domingo, los violentos arremetieron contra una oficina bancaria situada en el número 20 de la calle Mayor. El atentado provocó el ennegrecimiento de la puerta principal y del cajero exterior, sin que se registraran heridos.

En Lekeitio, un turismo resultó calcinado al ser afectado por las llamas de un contenedor de basura. El ataque se produjo a 5.45 del domingo en la zona del puerto.