El Congreso rechaza la enmienda de los populares contra el nuevo Estatuto Fiscal

El Pleno del Congreso de los Diputados rechazó ayer, con el apoyo de todos los grupos, la enmienda a la totalidad del PP al proyecto de Estatuto del Ministerio Fiscal, que superó su primer trámite parlamentario tras ser defendido por el ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo. El ministro, que procede de la carrera fiscal y este es el primer proyecto de ley que defiende, subrayó que los trabajos preliminares de esta iniciativa se han llevado por primera vez en la Fiscalía del Estado.

El proyecto introduce un nuevo régimen de nombramiento y cese del fiscal general, que tendrá un mandato de cuatro años y deberá someterse a una comparecencia ante una comisión del Congreso antes de ser nombrado por el Rey. Con las causas tasadas de cese, "desaparece la intervención del Ejecutivo", aseguró Fernández Bermejo, que destacó también la novedosa participación de la Junta de Fiscales de Sala en los asuntos que afecten a miembros del Gobierno.

El portavoz del PP, Ignacio Astarloa, calificó el proyecto de "pura propaganda" que refuerza "la vinculación del fiscal con el Gobierno" y dedicó el resto de su intervención a la descalificación personal del actual fiscal general, Cándido Conde-Pumpido.

Francisco Rodríguez, del Bloque Nacionalista Galego, recordó a Astarloa que no habido un periodo "más crítico ni más negro" que el de Jesús Cardenal al frente de la Fiscalía; Isaura Navarro, de IU-ICV, reprochó al PP su "irresponsable e impropia actitud"; Margarita Uría, del Grupo Vasco, dijo que tras oír a Astarloa y al ministro, "me ha gustado más el señor ministro"; Georgina Oliva, de ERC, consideró que el proyecto es un aceptable punto de partida e invitó al PP a "cambiar el disco"; Jordi Jané, de CiU, defendió, como otros portavoces, la autonomía presupuestaria para el Ministerio Fiscal y mayores competencias para los fiscales jefes de comunidades autónomas, y Julio Villarrubia, del Grupo Socialista, tras destacar la "brillante y contrastada trayectoria" de Conde-Pumpido en los "valores democráticos", tildó la enmienda del PP de "carente de rigor, hueca y superficial".