_
_
_
_
_

Aguirre anunció los nuevos hospitales sin contar con Sanidad para su planificación

La zona sureste de la región tendrá 3,3 camas por 1.000 habitantes, el doble que la zona sur

Oriol Güell

La Comunidad de Madrid, gane quien gane las próximas elecciones regionales, deberá hacer una "revisión estratégica" del futuro de los hospitales públicos, según un estudio de la Consejería de Sanidad. Ésta es la consecuencia de la apertura este año de ocho nuevos centros sanitarios (privados o de gestión mixta pública y privada), cuya ubicación decidió el equipo electoral de Esperanza Aguirre en 2003, y no Sanidad, según confirman ex altos cargos. El resultado es que cinco hospitales públicos tendrán "en riesgo su viabilidad", mientras otro, el 12 de Octubre, seguirá "sobresaturado". También crecerán las diferencias territoriales, ya que unas zonas tendrán el doble de camas por habitante que otras.

Prometer antes de planificar. La política en materia de nuevas infraestructuras sanitarias seguida por la presidenta Esperanza Aguirre se ha basado más en las campañas electorales que en la planificación sanitaria. Cuando en la de 2003 prometió construir seis nuevos hospitales, además de levantar una nueva sede para el Puerta de Hierro, los primeros sorprendidos fueron los dirigentes de entonces de la Consejería de Sanidad, también en manos del PP. "No había en la consejería ningún estudio de planificación hecho sobre esos hospitales", confirman dos de ellos, que piden permanecer en el anonimato.

Tras ser nombrada presidenta, Aguirre precisó su promesa en tres puntos. El primero fue la localización de los nuevos hospitales: Vallecas, Arganda del Rey, Coslada, San Sebastián de los Reyes, Majadahonda, Aranjuez y Parla. El segundo fue la gestión mixta pública y privada de los nuevos centros, con un coste de 3.500 millones de euros a pagar en 30 años.

La tercera novedad fue que habría un octavo hospital en Valdemoro, enteramente privado, y con cuyos promotores Sanidad firmaría un concierto para atender a 150.000 vecinos de la zona. Con este nuevo hospital, Aguirre logró cerrar la enconada pugna entre Parla y Valdemoro para tener un hospital.

Decidida la ubicación de los nuevos centros, Sanidad puso a trabajar a sus técnicos para saber qué impacto tendrían sobre la red pública. Inició este estudio casi un año después de la victoria electoral del PP (ver EL PAÍS de ayer).

"Es justo lo contrario de lo que hay que hacer", critica Lucas Fernández, portavoz del Sanidad del PSOE. "La planificación sanitaria es algo muy serio y delicado. De ella dependen miles de millones de euros y la salud de los ciudadanos. No es de recibo someterla a los intereses puramente electorales de un solo candidato".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

El resultado de todo está en las conclusiones del estudio de Sanidad sobre la repercusión de los nuevos hospitales sobre los antiguos. Señala que ahora "se hace imprescindible un proceso de revisión estratégica" y "redefinición de la misión" de los centros públicos y concluye que seis de ellos -Gregorio Marañón, Niño Jesús, Virgen de la Torre, Carlos III, Santa Cristina y Cruz Roja- verán "en riesgo su viabilidad" en "su actual configuración".

A otro gran hospital, el 12 de Octubre, la política sanitaria de Aguirre no le librará, según el citado estudio, de "continuar sobresaturado y necesitado de hospitales de apoyo" pese a que en su área se levantarán dos nuevos: Aranjuez y Valdemoro.

La apertura de nuevos centros ha profundizado las diferencias entre zonas de Madrid en camas por habitante: el área atendida ahora por el Gregorio Marañón dispondrá de 3,3 camas por 1.000 habitantes en 2008, mientras la del 12 de Octubre tendrá la mitad: 1,7.

El estudio de la Consejería también saca dos conclusiones positivas para la sanidad pública. La primera es que la reducción de pacientes en La Paz y La Princesa -por los centros de San Sebastián de los Reyes y Coslada- y lLa segunda es que los hospitales podrán operar a los pacientes que envían a clínicas privadas.

A la vista de los datos de este estudio, el candidato socialista a la Comunidad, Rafael Simancas, aseguró ayer que ésta es "la mejor prueba de la privatización" de la sanidad regional. Demuestra que "los nuevos hospitales ponen en riesgo los públicos", añadió. En cambio, el consejero de Sanidad, Manuel Lamela, aseguró que el citado estudio defendió que los nuevos hospitales permitirán "descongestionar" los antiguos.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Oriol Güell
Redactor de temas sanitarios, área a la que ha dedicado la mitad de los más de 20 años que lleva en EL PAÍS. También ha formado parte del equipo de investigación del diario y escribió con Luís Montes el libro ‘El caso Leganés’. Es licenciado en Ciencias Políticas por la Universidad Autónoma de Barcelona y Máster de Periodismo de EL PAÍS.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_